Gracias a la emisión de la convocatoria ahora se sabe que, antes de definir al ganador de la encuesta, Morena usará un primer filtro para cerrar a solo seis la lista de aspirantes al gobierno del estado, tres hombres y tres mujeres
Desde la mañana del lunes, después de que Mario Delgado Carrillo reveló en una entrevista radiofónica esa parte de las reglas, la clase política local comenzó a armar su listado de personajes que serán palomeados para ir a la contienda interna, que tendrá una duración de mes y medio.
Aquí no se hará la excepción y se procederá a especular con seis nombres.
Lo primero que hay que tomar en cuenta es que esa lista saldrá del Consejo Estatal del partido, lo que permite ver por dónde irán algunas de sus nominaciones.
Vaya primero con los hombres.
Si se recuerda que el presidente del Consejo se llama Andrés Villegas Mendoza, que fue puesto en esa posición por el barbosismo, y que además es subsecretario de Gobernación en la administración estatal, el primer anotado tiene que ser Julio Miguel Huerta Gómez.
Ahora piense que desde el Consejo Nacional se recomendará al menos un nombre y que ese será el del coordinador de los diputados federales de Morena.
Así que anote también a Ignacio Mier Velazco.
Si queda un lugar, ese no será para José Antonio Martínez García y seguramente tampoco para Rodrigo Abdala Dartigues.
Ponga a quien ocupó el primer lugar de las encuestas durante un largo periodo, Alejandro Armenta Mier, que probablemente obtenga el consenso de los dos consejos, aunque más del estatal.
¿Qué mujeres serán?
Utilizando el mismo razonamiento que con Julio Huerta, hay que poner aquí a Olivia Salomón Vibaldo.
Es imperativo dejar una posición para los consejeros nacionales, que propondrán a Claudia Rivera Vivanco.
No hay otra mujer que haya realizado labores de promoción personal como lo hicieron ellas dos, por lo que cuesta trabajo encontrar a la tercera que pueda integrar esta lista.
Si se busca un relleno, podría pensarse en la secretaria estatal de Bienestar, Lizeth Sánchez García, quien tímidamente ha dicho ser aspirante, o en Norma Layon Aarun, la alcaldesa de San Martín Texmelucan que en cinco años ha permitido que se desborde la inseguridad en ese municipio.
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Quien no se tardó en deshojar la margarita para saber si se va o se queda en el senado mientras se desarrolla la contienda interna es Alejandro Armenta.
El legislador de Morena dijo ayer en conferencia de prensa que presentará su licencia para meterse de lleno en este proceso, el cual, agregó, tratará de ganarlo a través de recorridos casa por casa en los diferentes municipios del estado.
Ignacio Mier, por su parte, ha confirmado que se quedará en San Lázaro y tiene motivos especiales para hacerlo.
El 8 de octubre rendirá su informe anual de actividades legislativas y gracias a ese ejercicio de comunicación podrá desplegar propaganda de promoción personal al menos durante una semana.
Está claro que aprovechará esa circunstancia para tratar de sumar algunos puntos a la encuesta que realizará Morena para definir su candidato a gobernador (o gobernadora).
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Alejandro Carvajal Hidalgo insiste en pedir a los dirigentes de Morena que cierren el paso a los chapulines y arribistas, esos especímenes, muy abundantes por cierto, que brincan de un partido político a otro sin el menor rubor.
El diputado federal de la 4T exhortó al Consejo Estatal del partido a evaluar bien los perfiles que aspiran a la Coordinación Estatal de la Cuarta Transformación, para impedir el registro de ese tipo de personajes.
Carvajal lo hizo en el contexto del proceso de selección de candidato a gobernador que empezó ayer, pero no dio nombres.
Mientras no haga menciones concretas no podrá ayudar mucho a los consejeros estatales de su partido.
