No cabe duda que, en los próximos días, vamos a ser testigos de un acontecimiento deportivo, en donde una joven originaria del estado de Puebla, dará ejemplo de esfuerzo, perseverancia y determinación para salir avante pese a las adversidades; el próximo fin de semana, para ser exactos, el viernes 18 de octubre, Gaby “La Bonita” Sánchez, la campeona mundial Silver del Consejo Mundial de Boxeo (WMB) estará defendiendo por segunda ocasión su título mundial en la rama del boxeo femenil.
Gaby a lo largo de su carrera ha superado muchos desafíos, la disciplina y determinación, la llevaron a experimentar nuevos horizontes como el mundo del boxeo, tras ser víctima de bullying escolar, situación que bien pudo cambiarle la vida hacia otros rumbos. Como ella, en Puebla, hay otros personajes; Sofía Reynoso, Marcos Madrid y Gibrán Zea, quiénes han puesto en alto el nombre del estado en justas deportivas entre los que se encuentran juegos olímpicos, canotaje, tenis de mesa y esgrima, esto solo por mencionar un ejemplo.
De acuerdo al reporte en Imjuventud.gob.mx, elaborado por el Consejo Nacional de Población (CONAPO), en Puebla, la población joven representa el 32.1 por ciento del total de habitantes, de esta cifra, el 8 por ciento presenta alguna discapacidad, limitación o problema de condición mental, y el 1.8 por ciento son jóvenes que se consideran afromexicanos o afrodescendientes; mientras que, a nivel nacional este sector de la población representa el 30.7 por ciento.
Ante este panorama es de celebrar que las autoridades estatales, abran puertas de oportunidad para que la juventud demuestre sus talentos, como emprendedores, músicos, artistas, deportistas, pintores, escultores y científicos para ser aprovechados, considerados en el sector de población económicamente activa y lo más importante, alejarlos de las drogas y la delincuencia.
Impulsar un modelo de desarrollo inclusivo es un reto para la transformación, el cual debe incluir tecnología, el cuidado de los ecosistemas y medio ambiente para las futuras generaciones; un esquema para disminuir la desigualdad con una mejor distribución equitativa de la riqueza, con la finalidad de aprovechar los recursos de manera más racional en beneficio de los jóvenes y en el mejoramiento de infraestructura.
Los jóvenes deben enaltecer la honradez, la honestidad, la transparencia y el compromiso como sus principales virtudes, como una llave que les abra las puertas a proyectos que van a desarrollar, para ejercer liderazgos, en una revolución de ideas como una forma de desarrollar experiencia, poniendo a aprueba conocimientos en la vida profesional y laboral
Como sociedad debemos pensar en todos los factores para dejar un futuro mejor para este sector de la población, desde el cuidado del medio ambiente, mejores condiciones laborales, un hábitat más seguro, impulsando valores en ellos y ellas, con una sociedad incluyente, tolerante a la intelectualidad y preferencias, así como principios que los encamine a un ambiente de paz y convivencia.
