Una verdadera bendición fue la que recibió la familia Gil Cerezo, tras celebrar el bautizo de su hijo Javier a través de una reunión con familiares y seres queridos.
La capilla de Dolores fue el sitio donde se ofreció la ceremonia religiosa, lugar donde el pequeño fue llevado al altar en brazos de sus padres Javier Gil y Karla Cerezo. El momento más importante de la celebración fue cuando el pequeño recibió las aguas del río Jordán, acompañado de Alicia Cerrillo Ruiz, quien fungió como su madrina.
Más tarde se ofreció una recepción en el hotel boutique Casareyna, donde los asistentes disfrutaron de un desayuno.
Durante el festejo los presentes llenaron de bendiciones a la familia, pero principalmente al bautizado, quien se notó muy consentido durante la especial ocasión.