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Los huevos poché o huevos escalfados son una receta muy fácil que te ayudará a conseguir un plato con mucho gusto y bajo en calorías.
Tradicionalmente se cocinan en platos cremosos, pero hay multitud de recetas que se enriquecen si se acompañan con esta elaboración. También son una delicia para degustar solos y lo mejor de todo es que los puedes aderezar con lo que quieras.
Además de disfrutar de su sabor hay que destacar que es uno de los mejores métodos de cocción de los huevos porque no se suma grasa a su elaboración y es lo más parecido a disfrutar de unos huevos fritos.
Solo necesitas un huevo, agua, sal, limón (o vinagre) para su elaboración tradicional. Si deseas cocinarlos de la forma actual, agrega a tu lista especias, hilo y papel de cocina transparente (film transparente). Sigue estos consejos y conseguirás cocinar los mejores huevos poché.
MÉTODO TRADICIONAL
Pon a hervir un huevo, como si lo fueras a hacer tibio, a fuego lento y cuando consideres que ha quedado hecho por dentro, además de consistente, retíralo del fuego.
Espera a que enfríe y cuando lo tengas a temperatura, que no te queme las manos, retira la cáscara para dejarlo completamente pelado.
En una olla con abundante agua y un chorro de vinagre o limón (para facilitar la coagulación) introduce el huevo y deja que se vaya haciendo poco a poco bajo la mezcla. Para darle la forma redonda ayúdate con una cuchara y ve cubriendo la yema con la clara a medida que se va cociendo. Dejar reposar para después colocarlo sobre pan, ensaladas, sopas y lo que se te ocurra.
COCINA ACTUAL
En una taza o bowl coloca un trozo de papel de cocina transparente que rebase el tamaño del recipiente, lo suficiente para después envolver el huevo y hacer un saquito. Engrásalo con aceite de oliva y a continuación vierte el huevo. Adereza al gusto con suficiente sal, y añádele especias u otros ingredientes troceados que le proporcionen sabor.
Toma las puntas del papel de cocina y ve uniéndolas, retira el aire del interior a medida que vayas formando el saquito, dale unas vueltas y termina atando con un hilo de cocina.
Pon a calentar suficiente agua en una olla y cuando empiece a hervir introduce los saquitos con los huevos por cuatro minutos. Después retira los saquitos y pásalos a un recipiente con agua fría, de preferencia con hielo, para cortar la cocción.
Corta el hilo de cocina y retira el huevo del papel de cocina transparente. ¡Listo! ya dispones de tus huevos poché para incluirlos en cualquier plato.
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