Si crees que necesitas algún tipo de disciplina que te pueda ayudar a mejorar tu salud, elevar tu autoestima, fortalecer tus músculos, aprender a respirar, a liberar la tensión y que al empezar a sentir tu cuerpo digas ¡qué lindo ejercicio!, entonces quizá deberías practicar Chi Kung (Qigong) que, de acuerdo con la definición de la Asociación Kung Fu - Tai Chi Chuan - Chi Kung – Puebla, es el estudio del campo energético del cuerpo y su aplicación para lograr objetivos determinados.

Esta práctica tiene su origen en China, al igual que todas las artes marciales; su nombre significa “trabajo de energía” para su desarrollo en los humanos y, según explica el maestro Isaí Mendoza, en aquel país oriental existen de 3,000 a 5,000 métodos para enseñarlo, la mayoría sirven para la salud, ya que esta es primordial en la vida.

Añade que hay muchos métodos, específicos para cada órgano: corazón, hígado, riñones, tendones, huesos, piel, por citar algunos y no se trata solo de hacer ejercicio, sino que va más allá; implica también un régimen de alimentación saludable.

Hay muchos métodos, pero aquí en occidente el que más se practica es el Shinai Chi Kung, con movimientos que te conectan con el cielo y la tierra, y captas energía para mejorar tu salud. Está también el Chi Kung de los cinco animales, basado en los ejercicios que hacen los animales: cómo se estira el perro, el gato, cómo se expanden las criaturas del campo, agrega.

HISTORIA

Las artes marciales chinas tienen más de 5,000 años, son las madres de todas las artes marciales del mundo, porque es una cultura muy antigua. Algunos estudiosos del tema dividen la historia del Chi Kung en cuatro períodos, desde la aparición del I Ching (Yijing) o Libro de los Cambios. Yang Jwingming, en su libro “La Raíz del Chi Kung” los divide, tomando como referencia las diferentes dinastías, de la siguiente manera:

Periodo Pre-Han (¿? – 206 a.C) – Surge el I Ching, Chi Kung naturalista.

Periodo Han hasta principios de la dinastía Liang (206 a.C. – 502) – Chi Kung religioso.

Periodo Liang hasta término de la dinastía Ching (502 – 1911) – Chi Kung marcial.

Era moderna – Chi Kung se abre ante la ciencia y ante un público global.

LAS CATEGORÍAS BÁSICAS

Agrega que según la categoría del Chi Kung, se pueden observar diferentes características y se tienen varios objetivos, dentro de cada una de ellas hay diversos métodos de entrenamiento, de acuerdo con lo que se quiera lograr. El hecho de que existan miles de ejercicios de Chi Kung, permite que cualquier individuo encuentre el adecuado para su persona; la gran mayoría son preventivos, aunque muchos pueden ayudar incluso a curar males.

Las categorías básicas en las que se divide el Chi Kung son:

Chi Kung de las escuelas filosóficas Confuciana y Taoísta. Buscan la promoción de la salud, prevención de enfermedades y, en el caso de la escuela taoísta, longevidad. Regula la actividad mental y cultiva la energía vital (chi ó qi).

Chi Kung Médico. Es preventivo y curativo. Corrige la circulación anormal del Chi para acelerar una curación o incluso, en ciertos casos, curar una enfermedad.

Chi Kung Marcial. Para su aplicación en combate. Existen dos subdivisiones: Chi Kung externo (waidan) que concentra el Chi en los jing (canales de energía) y Chi Kung interno (neidan) que concentra el Chi en los mai (reservorios de energía).

Chi Kung Religioso. Para obtener la iluminación. El objetivo es fortalecer el Chi para nutrir el Shen (espíritu) hasta que este último pueda sobrevivir a la muerte del cuerpo físico. Existen tres subdivisiones: budista, tibetana y taoísta (religiosa).

Hay Chi Kung estático o inmóvil, sentado, acostado y también hay en movimiento, caminando; el Taichí chuan es un Chi Kung pero en movimiento. Sus ejercicios no son difíciles, puede hacerlos todo mundo; si es que les gusta y desean practicarlo, pueden hacerlo personas desde los 5 hasta los 100 años de edad.

LOS BENEFICIOS DEL CHI KUNG

El principal beneficio que se obtiene al practicar el Chi Kung es la salud, la misma meditación, ya sea budista, taoísta o el nombre que sea, tiene el fin de encaminarlo a estar saludables; la ansiedad, angustia, depresión, todos esos males se van arreglando con un Chi Kung, porque al final este es como una meditación, solo que en movimiento, sentado, parado..., menciona Isaí Mendoza, maestro de esta disciplina, durante una entrevista.

IDEAL PARA ADULTOS MAYORES

“Es muy recomendable para adultos mayores, porque fortalece las extremidades inferiores, les da mucha fuerza a sus músculos; cuando una persona grande ya va teniendo inseguridad, desconfianza al caminar o al pararse de su cama, cuando se cae le entra la desconfianza, entonces el Chi Kung fortalece mucho las piernas y le va dando estabilidad y confianza. Además, se le enseña a respirar, a liberar la tensión, empieza a sentir su cuerpo y dice ‘¡ay, qué lindo ejercicio!’”, agrega el entrevistado.

Asegura que hay unos artes marciales que sí tienen edad, no pueden practicarlos tan fácil las personas mayores porque ya no eres rápido, ni tan fuerte; conforme creces vas perdiendo esas cualidades naturales con las que nacemos, te haces más lento, menos fuerte, menos rápido. Pero Con el Chi Kung no se pierden, sino que se acrecientan más, se desarrolla flexibilidad, fortaleza física, estabilidad, emocional y mental.

DÓNDE PRACTICARLO

En Puebla existen varias escuelas, que pertenecen a una asociación dedicada a promover la práctica de Kung Fu, Tai Chi Chuan y Chi Kung. La que visitamos para realizar esta entrevista se ubica en el Bulevar 2 de octubre número 3316-5, frente a Plaza Dorada; para mayor información acerca de las demás que forman parte de esta agrupación, puedes visitar su página web: https://sites.google.com/site/taichikungpuebla/artes-marciales-chinas/chi-kung

Ahí se imparten clases los días lunes, miércoles y viernes de 9 a 12 del día, guardando la distancia y con sus respectivas reglas sanitarias; el cupo máximo es de 4 alumnos por clase, porque el área es pequeña. Los costos son de $550 al mes, con una inscripción de $100, para dos clases a la semana.

“Los invitamos a que vengan y practiquen un arte que les va a dar salud, confianza, seguridad en sí mismos, que les levanta la autoestima, porque los hace responsables, disciplinados, trabajadores y la constancia hace buenos estudiantes”, concluye el maestro Isaí.