¿Cómo manejar los berrinches? | CONSTRUYENDO MI FELICIDAD

Redacción

  · jueves 5 de octubre de 2017

Un berrinche es una extrema reacción de enojo, desilusión,exigencia, impotencia y demás, que se presenta cuando las cosas noson como se quiere ni en el momento en que se desea.

Aunque esta conducta es normal en los niños de entre uno ymedio a tres y medio años de edad, aproximadamente, también seencuentran muchos adultos que la presentan. Los berrinches de losniños a la edad mencionada son parte del proceso de desarrollo,debido a que en esta etapa de la vida la meta por lograr es laAUTONOMÍA: la separación de la madre para diferenciarse como unindividuo aparte.

Los bebés no tienen individualidad, podríamos decirlo así. Seperciben a sí mismos como una unidad con su madre, lo cual sellama simbiosis. Para poder lograr esa individualidad y undesarrollo sano hacia la siguiente etapa, la psique del niñoinstaura el berrinche como una herramienta para reafirmarse a símismo, para expresar y dejar bien claros sus sentimientos,necesidades y deseos.

Un manejo inadecuado de esta conducta puede ser permitirle alniño el berrinche y ceder a sus demandas. Otra faceta de un malmanejo es reprimirlo en exceso, determinando el berrinche mediantegolpes, gritos y fuertes castigos.

El primer tipo de abordaje creará una fijación en esta etapa,en el sentido de que la persona seguirá siendo un niñoberrinchudo, aunque metido en un cuero de adulto; éste presentarádicha conducta cada vez que las cosas no sean como las quiere y enel momento en que lo desea.

Por el contrario, cuando ha habido excesiva represión yagresión ante el berrinche, la fijación en esta etapa semanifiesta a través del desarrollo de una personalidad pasiva,demasiado complaciente y dependiente.

Puede ser que también desarrolle importantes conflictos con laautoridad, lo cual se manifiesta en no respetar jerarquías e ir encontra de las reglas nomás porque sí, aun cuando éstas seannecesarias y útiles para todos.

La siguiente es una forma sana de manejar los berrinches de losniños, que te convendrá tomar solo como una guía que túajustarás según las circunstancias, y no como en una recetarígida.

Cuando el niño quiere algo, sea lo que sea, hace un berrinchepara conseguirlo. A veces hay que otorgarle lo que quiere, pero aveces no. Para discernir si es conveniente, pregúntate:

*¿Eso que quiere perjudica a sí mismo o a otros? *¿Va a tenerconsecuencias desfavorables en el futuro cercano o lejano delniño?

Si respondes que aquello que tu hijo quiere NO lo perjudica así mismo o a otros y tiene consecuencias indeseables, entoncesdeberás responder con un NO firme y consistente. Esta negativa sinduda ocasionará un berrinche. Ante ello, explícale UNA SOLA VEZ,con voz tranquila pero firme y viéndolo de frente.

*No vas a tomar golosinas porque no has comido. Aunque llores yte enojes, no te voy a dar. *No te voy a comprar un juguete hoy. Tedije antes de salir de casa que no te iba a comprar ningúnjuguete, aunque llores no te lo voy a comprar. *No puedes jugar conla computadora de tu papá, ya sabes que eso no lo debes tocar. Lavoy a retirar de aquí.

Y acompaña tus palabras con acciones acordes a ellas.

Enseguida, es muy importante que ignores el berrinche, en lugarde ponerle atención o seguir repitiéndoles las mismasexplicaciones una y otra vez. Cuando le ponemos tanta atención auna conducta, la reforzamos. Una vez que te has calmado (no antes)exprésale tu amor de la manera que quieras y ya no sigas hablandodel asunto.

Algunos niños tienen a hacer demasiado drama, y a vecespresentan reacciones que pueden resultar peligrosas, como jalar ogolpear algo. Hay que “echar” un ojo durante el berrinche, y siestas cosas suceden, debemos detener el berrinche de inmediato,alejando al niño del peligro, el resto del proceso sería como lomencioné.

¿Y cómo manejar los berrinches de los adultos? Puesexactamente bajo el mismo principio. Es indudable que algunosadultos también hacen berrinches…estilo adulto, por supuesto. Esdecir, no se tiran al suelo a patalear ni se ponen a gritar yrevolcarse en público.

Los berrinches adultos se manifiestan normalmente en terquedadessin sentido y toda clase de reacciones infantiles cuando las cosasno son de su agrado. No debemos entrar en el juego ni dejarnosmanipular por esa conducta.

Veamos un ejemplo: Las cosas no se dan como tu familiar adultoquiere, entonces éste hace un berrinche diciendo que no irá a tallugar. En lugar de dejarse manipular por esa conducta, privándosetodos de ir o rogándole que cambie de opinión, hay que decirlealgo como: “bueno, pues si no quieres ir, nos vemos al rato,porque nosotros sí vamos”…y háganlo.

A veces los berrinches de los adultos son tan absurdos, que seniegan a algo porque están enfurruñados, como sí con esocastigaran a alguien. La verdad es que sólo se castigan a símismos. Una maestra que tuve cuando estaba en primero desecundaria, cada a vez que alguna alumna presentaba una conductaberrinchuda, le decía: “tú estás como el loco que dice: nocomo, amuélese quien se amuele”. Esta frase lo dice todo.

La conducta de berrinche, tanto de los niños como de losadultos, se superará con un manejo adecuado. Los niños de la edadmencionada la presentan por un proceso normal en esta etapa de sudesarrollo, y los adultos porque cuando son niños no hubo quien lamanejara apropiadamente y la llevan hasta su adultez. Con laconducción adecuada, los niños transitarán sanamente por estaetapa de su vida. Con el manejo adecuado, los adultos podránsuperar esa fijación y madurar. ¡Qué maravilla!

* Tanatoterapeuta, trabajos con pérdidas, duelos,angeloterapia. Niños, adolescentes y adultos. Teléfono:2221-199224