Hoy en día existen muchos grupos y personas dedicadas a proteger a los animales, que han realizado una buena labor en nuestro país para lograr que se legisle a fin de evitar su maltrato; pero existen algunas prácticas que muchos consideran como tal, cuando en realidad no lo son. En contraparte, hay otras cuestiones en cuanto a su cuidado que comúnmente pensamos que están bien y en realidad van en contra de su naturaleza.
Para ahondar en el tema de lo que sí es y lo que no debería considerarse como maltrato animal, charlamos con Daniel Arjona, especialista en adiestramiento de caninos, con 30 años de experiencia, quien nos da su punto de vista acerca de varios aspectos.
PONERLOS EN UNA JAULA
A este respecto, el entrevistado afirma que transportar a un perro en su jaula cuando salimos de viaje o cuando vamos en el auto no tiene nada de malo, es preferible y mucho más seguro llevarlo en su kennel cuando vamos en coche, en lugar de que ande suelto por todo el carro, con el riesgo de lastimarse o provocarnos un accidente.
También, por ejemplo, si tenemos visitas en casa y el perro no se está quieto, o si tenemos que limpiar el patio o la cochera, puedes ponerlo un rato en su jaulita o incluso amarrarlo un rato con su correa y lo sueltas después. Esto no le hace daño, es como cuando una mamá tiene que hacer algo y pone a su bebé en la sillita o en su cuna un rato.
Lo que sí es maltrato animal es si tienes perros en tu casa, los tienes todo el tiempo en la azotea, no les das de comer, no les das agua, ¡y de vacunas ya ni hablamos!, tampoco se las pondrías. También lo es tenerlos amarrados las 24 horas, no es justo para ellos.
ENCERRADOS EN CASA
Tampoco es justo tenerlos atrapados en la casa, asegura Daniel y reflexiona que, si te pones a pensar: ¿quién es más feliz?, un perro callejero, que tiene que buscar su comida, que está en peligro de que lo atropellen, de que le avientan piedras, pero que es libre, que hace lo que quiere… o un perro que esté encerrado en tu casa, que no pueda salir, que lo tienes como un pajarito en su jaula. Le das de comer, lo tienes muy bien, pero el perro no tiene ninguna libertad. ¿Cuál de estos dos casos es el maltrato?
“Yo creo que, si le das escoger al perro, él diría: ‘¿sabes qué? yo me voy a la calle y déjame encontrar mi comida como yo pueda, pero déjame moverme libre’, así era hace muchos años, de 1800 para atrás los perros no vivían adentro encerrados; en los ranchos estaban afuera, probablemente entraban en la casa, se quedaban un rato y se volvían a ir. Actualmente en los pueblos así lo hace la gente, les dan de comer en su casa, pero el perro anda en la calle; si vas a Cholula lo puedes ver en cualquier calle”, indica.
TENERLOS EN UN PATIO CHIQUITO
El experto asevera que los perros se adaptan, si tú tienes un espacio pequeño en tu casa no vas a tener un gran danés u otra raza muy grande, pero se puede acomodar al espacio que tú tengas, porque se supone que el perro es tu compañero. Si vas a salir a la calle y tienes necesidad de dejar al perro, por ejemplo, en la azotehuela, pero cuando regresas vuelve a estar contigo, le abres la puerta y se mete, porque es tu compañero, hasta ahí no puede haber maltrato animal.
Agrega que sí lo sería si lo tienes en esa azotehuela 24 horas, no le limpias, le das de comer cuando te acuerdas y el pobre no tiene ni agua y también lo es si está en soledad, como prisionero, porque ellos son animales de manada y lo que quieren es estar con nosotros, porque nos consideran parte de su manada, y nos siguen para donde vayamos: dentro de la casa o fuera, en el jardín.
DORMIR AFUERA
Arjona expone que los perros por naturaleza son animales de exteriores, nosotros los queremos tener adentro, con nosotros y los perros aceptan, porque están con su manada, pero sí pueden dormir afuera; todos vienen de los lobos, está comprobadísimo por ADN, no es una teoría, y lobos viven afuera, además su temperatura corporal normal es de 38.5 grados, para nosotros ya es calentura, pero ellos no sudan, nosotros sí.
“A los perros les podemos dar una opción: te quedas afuera o te quedas adentro y él va a escoger dónde se siente más a gusto; yo he tenido perros que les dejo la puerta abierta de la cocina, por ejemplo, para que entren si quieren y cuando me duermo, van y se ponen afuera, porque ahí están más frescos, eso de querer tenerlos adentro es tratar de humanizarlos y ahí sí los sacamos totalmente de lo que es su naturaleza y eso es maltrato animal”, añade.
La próxima semana seguiremos con este tema acerca de algunas cuestiones en cuanto al cuidado de los perros en las que, sin saberlo, podríamos cometer cierto grado de maltrato hacia ellos y el experto en su cuidado nos da su opinión.
Si deseas asesoría o entrenamiento para tus perros, puedes contactar a Daniel Arjona al número celular 2221-93-36-96