La vida después del confinamiento no será igual. Aunque no sabemos cuándo será posible el regreso a la “nueva normalidad”, los grandes edificios de oficinas, escuelas y universidades tendrán que hacer adecuaciones en sus espacios y áreas comunes, implementar señalizaciones, normas de higiene y protocolos de seguridad, para minimizar riesgos y evitar un rebrote del virus, ya que algunas personas seguirán siendo portadoras asintomáticas y ellas podrán seguir haciendo su vida normal, pero infectando potencialmente a otros.
De acuerdo con Montserrat Pliego Azcue, médico del área de urgencias de la Universidad UPAEP, “primero se tiene que hacer la limpieza, mantenimiento y sanitización de los filtros de aire, ya que en ellos es donde más se acumulan hongos y bacterias. También lavar cisternas y tinacos, y hacer la cloración del agua para que se mueran los gérmenes que pudiera haber en las tuberías. Después sanitizar todos los espacios y áreas comunes, desde barandales, ventanas, puertas y muebles de baños, etcétera”.
Asimismo, enfatiza que es importante generar señalética de prevención en áreas comunes (pasillos, oficinas, estacionamientos, baños y entradas) e implementar las medidas de la sana distancia (separar sillas, poner señalamientos en los lugares que se pueden ocupar, marcar los pisos con cruces en los espacios de distancia). Es muy importante que esté señalado que, para ingresar al edificio y transitar por cualquier área, se debe usar cubrebocas.
Definir una entrada y una salida a las áreas. En todas las entradas debe haber un tapete sanitizante, un despachador de alcohol en gel, en su caso también utilizar sanitizante ambiental. Apunta que “según la OMS, las sales cuaternarias tienen un porcentaje elevado para matar bacterias, hongos y virus. En farmacia Medina las tienen en spray”.
En los accesos, los vigilantes de módulos o recepcionistas deben usar careta, cubrebocas y guantes, ropa con manga larga para no tener zonas de la piel expuestas. Implementar un filtro Covid en todas las entradas ayudará a la detección temprana de signos de alerta. “En caso de que se detecte una persona con fiebre, dolor de garganta, síntomas respiratorios y problemas digestivos, se le tiene que limitar la entrada hasta que no vaya al médico y compruebe que no tienen complicación”, advierte.
Refiere que el personal de mantenimiento tiene que usar cubrebocas, guantes y ropa de manga larga, por lo menos hasta septiembre. Deben utilizar un trapeador y una escoba para cada área. Tiene que haber horario de higiene para evitar el medio de contacto.
LIMPIEZA Y SANITIZACIÓN DIARIA
Los baños deben limpiarse y sanitizarse constantemente, y contar con gel antibacterial. Subraya que debe haber un bote de desechos específicamente para cubrebocas y guantes; se tiene que contratar una empresa especializada para que retire los desechos o se hace una solución de agua con cloro que se agrega al recipiente.
En las oficinas se deben desinfectar pisos y sanitizar el ambiente con spray o aerosol de sales cuaternarias. Mantener las oficinas ventiladas y que penetre el sol, si se puede. Se deben crear espacios para que en ninguna oficina pequeña haya más de tres personas. Si hay gente expuesta al público debe tener una separación por lo menos con acrílico. Tener siempre a la mano toallitas con cloro, o una cubetita con cloro y pinol y paño, para limpiar constantemente las superficies.
“En las salas de junta lo mismo, hay que generar los espacios de la sana distancia, portar el cubrebocas, no consumir alimentos. Los espacios deben reducirse al 50%, si una sala era para 20 personas ahora será para 10. Las herramientas de trabajo (computadoras, teléfonos, etcétera) deben ser sanitizadas constantemente y más si son de uso compartido, no olvidar hacerlo cuando se haga el cambio de turno. Se aconseja limitar el uso del celular, porque es un medio de contagio”, advierte.
Enfatiza que se debe seguir fomentando la higiene como el lavado de manos constante. No portar joyería o accesorios, en caso de los hombres sin corbata, sin bigote y sin barba. Gel de uso personal en bolsa y cubrebocas extras para que se hagan un cambio. Las mujeres con el cabello recogido, en recepción o ingresos.
En el caso de contar con cafetería, el manejo, recepción y almacenamiento de alimentos debe ser igual de estricto. El que prepare la comida debe usar cubrebocas y gorro quirúrgico (no malla) y se deben separar los espacios.
Cabe mencionar que Pliego Azcue formó parte del proyecto “Medidas y Requerimientos de Protección y Bioseguridad para el regreso a las actividades universitarias y de bachillerato”, elaborado para la UPAEP. Basado en los Lineamientos Técnicos de Seguridad Sanitaria en el Entorno Laboral, publicados el 14 de mayo; Lista de Comprobación ante el Covid-19 para el retorno al trabajo del IMSS; Protocolo Académico y Administrativo de la Universidad de Colombia; y todas las reglas específicas de la Organización Mundial de la Salud (OMS).