Analizando la gran pandemia de la gripe española de 1918, tenemos que entender que las enfermedades contagiosas tienden a tener un peligroso repunte en periodos tan largos como dos años. Esto quiere decir que, a pesar de que los contagios empiecen a disminuir, no desaparecerá por completo durante un buen tiempo. En Europa, algunos países ya han regresado a sus actividades normales, pero con un estricto control de sus fronteras y de la contención de los casos nuevos.
En Puebla ya hay apertura de lugares comerciales y negocios, pero contribuyamos a que los contagios sigan bajando a beneficio de todos nosotros. Si en su familia y círculo de conocidos no ha presentado enfermos de Covid-19 o muertos relacionados, participe cuidándose y cuidándonos a todos.
Pero ¿cómo lo podemos hacer? Aunque parezca altamente repetitivo: aumentemos nuestra higiene personal, lavemos nuestras manos en forma frecuente. En ausencia de agua y jabón usemos el gel con alcohol al 70% o más. Usemos el cubrebocas, no durante 15 días, ya que es mejor que lo usemos por el resto del año. ¿Requiere de hablar con clientes? Va a necesitar el uso de careta o bien, mantenga una distancia mayor a 1.5 metros. Mantenga los lugares bien ventilados. No toque su cara o hágalo después de tener limpias sus manos.
Se espera que, al recobrar la gente sus actividades normales, los contagios aumenten. Lamentablemente son los pequeños detalles donde un descuido permite la enfermedad. Debido a que los cubrebocas y mascarillas son incómodas, muchos de nosotros nos las quitamos de manera frecuente.
Es seguro retirarla cuando estamos solos o no hay mucha gente alrededor. No toque la superficie protectora, debe quitarla de los cordeles con que se fijan. Si usa una mascarilla de tela, debe lavarla diariamente. Los cubrebocas desechables pueden ser reutilizados, evitando que se humedezcan. Al final de su vida útil deséchelos en la basura y no los tire en la vía pública.
Desafortunadamente hay muchas otras cosas que se asocian con el uso de mascarillas y la presencia aún de la pandemia. Numerosos casos de crisis nerviosas, insomnio y paranoia encabezan la lista, así como enfermedades dermatológicas a los que encabeza el acné por el uso continuo de los cubrebocas.
Aunque no hay evidencias de que los medios de protección produzcan daños pulmonares, son incómodos. Deberían de usarse en forma alterna, descansar unos 5 minutos por cada hora de uso. Probablemente ha adoptado una nueva costumbre para vivir en esta pandemia, esperemos que sea para su beneficio en esta nueva normalidad.
*Médico coordinador de atención Covid primer nivel, INSABI
Teléfono: 222-246-1662