Degas, ajenjo y comida mexicana

Redacción

  · sábado 18 de marzo de 2017

MADRID, España.- La sala H, ha estado dedicada desde su origenal impresionismo francés, se diseñó para albergar diez cuadros,hoy sólo hay tres, entre los ausentes la firma de Degas es la másañorada por los visitantes al Museo Thyssen desde Octubre del añopasado.

La heredera del museo, María del Carmen Rosario Soledad Cerveray Fernández de la Guerra, coloquialmente llamada “TitaCervera”, pasó de Miss España en 1961, a las artes escénicas yconsiguió en 1985 ser la pareja oficial del Barón Hans Heinrichvon Thyssen-Bornemisza, poseedor de una de las mejores coleccionespictóricas de Europa. El barón y la baronesa, se asentaron enMadrid y en 1992 se abrió luego de cuatro años de negociacionescon el gobierno español, el Museo Thyssen para alojar las casi milpiezas del barón valuadas de 2 mil millones de dólares.

Pero hoy, Tita Cervera dice no tener dinero para mantener elmuseo, una especie de chantaje dicen algunos, para obligar algobierno a reforzarla con metálico, de ahí la desaparición delos cuadros de Degas.

Zalacaín enamorado de algunas obras de Edgar Degas se habíapasado alguna vez para observar la colección del barón, inclusollegó a saludarlo en alguna ocasión, enfundado en una chaquetacruzada Blazer, pantalón gris oxford y zapatos de ante colormarrón, el barón ya era mayor, pero lucía impecable y portabacon dignidad el invento del almirante capitán de la fragata HMSBlazer, quien la diseñó en sustitución del uniforme marinero enla época de la Reina Victoria, siglo XIX y quien al visitar elnavío autorizó se hicieran las prendas similares para uniformar alos miembros de las Royal Navy.

“Caballos de carreras en un paisaje” es la obra firmada porDegas en 1894 y cuyo valor de salida ronda casi los 30 millones deeuros y es el tema en boga entre los coleccionistas y críticos dearte, pues la colección Thyssen podría empezar a desmoronarse.Hilaire Germain Edgar Degas no fue pintor en sus inicios, estudióderecho y debido a la buena economía de su familia pudo dedicarsea complacer los gustos de su padre por el arte y hoy día formaparte del exquisito grupo de impresionistas.

El aventurero Zalacaín caminaba rumbo a la Plaza de Españadonde había quedado con un amigo propietario de un hostal reciéninaugurado en el penúltimo edificio de la Gran Vía. En la radiose comentaban las nuevas tendencias gastronómicas de la temporada,el sector estaba presentando nuevas ofertas y se sumaba aldespertar en otras naciones, el comentarista citaba el éxito de lacocina tex-mex y mexicana en Londres donde los puestos callejerosde comida habían conseguido ya un sitio en localesestablecidos.

“El Pastor” ahora tenía local propio en Borough Market,inspirado en las taquerías de la Ciudad de México donde suspropietarios, Sam y Crispín Somerville vivieron algún tiempo,ofrecen salsas caseras, verde, morita, de chile habanero, unallamada “negra” con base en tomatillo tostado con chileserrano, otra de chile de árbol y la popular “mexicana”, cadauna por 3 libras la orden.

La especialidad son los Tacos al Pastor con Guacamole por 5.50libras o con “totopos de chicharrón” por 6.50. También hayquesadillas, choripapa, cueritos de chicharrón, sopa de tortilla,aguachile de camarón y una amplia variedad de tacos de carne.

Otro establecimiento de comida mexicana es el “Breddos” enel distrito de Clerkenwell donde se da la cocina fusión entreingredientes británicos y recetas mexicanas como la CochinitaPibil, pollo frito con habaneros y salsa pico de gallo, unavariedad de tostadas de aguachile, pulpo, setas con vinagreta, conprecios alrededor de los 7 libras la orden. Las Tlayudasoaxaqueñas tienen un espacio en Breddos con carne de puerco,habanero, naranja y frijoles negros, otra de Tinga de Pollo y unamás de queso Chihuahua con frijoles y curry por 8 libras.

Finalmente, el comentarista gastronómico citaba la presencia de“Corazón Taquería” en el Soho, en Poland Street, muy cerca deMarks & Spencer, donde la especialidad además de la comida sonlos cocteles con base en el tequila y el mezcal, cuyos nombresresultaron totalmente desconocidos para el aventureroZalacaín.

El sitio presume de elaborar las tortillas a mano y ofrecer unacocina creativa. Destacan las papas a las tres salsas, pico degallo, tomatillo asado y chilpotle; las tostadas se preparan concangrejo blanco, chile pasilla y cebollas a la parrilla; los tacosson de “carnitas” con orégano, chile jalapeño y salsa verde,a razón de 2 por 8 libras, otros de pollo en achiote conpiloncillo, también de carne asada marinada y puestos en tortillasazules, barbacoa de borrego con adobo, los famosos “TacosGobernador” aparecen en su carta a 11 libras el par. CuriosamenteCorazón Taquería oferta Pozole Rojo, Esquites y Arroz confrijoles.

El aventurero Zalacaín recordó su última visita a París, de“pisa y corre”, apenas le había dado tiempo de pasar unmomento por el Museo de Orsay antes del almuerzo. Se concentró enun cuadro conocido por todos como “La Absenta, pero para elaventurero seguía siendo Los Bebedores de Absenta” donde Degashabía plasmado una escena totalmente apegada a su sentimiento ydicho: “En el arte nada debe parecer accidental, incluso unmovimiento”. Todo había sido preparado, el escenario era elcafé “Nueva Atenas”, el famoso sitio de Place Pigalle, la zonapredilecta de los impresionistas de finales del XIX; Degasconvivía ahí con Vincent Van Gogh y Henri Émile BenoîtMatisse.

Un buen día Degas citó ahí a la actriz Ellen André quienrepresentó el papel de una prostituta común de Pigalle sentadajunto a un presunto vagabundo quien en realidad era el pintor ygrabador Marcellin Desboutin, frente a ella hay una copa llena deabsenta de color verde, él con un café y una pipa en la boca, enla mesa contigua ubicada en el primer plano aparece una jarra deagua, la escena se convirtió en una gran elocuencia a la aficióny los efectos del ajenjo cuyo consumo en abundancia produceintoxicación y cuya bebida resultante al ser convertido enaguardiente fue prohibida después de la llamada Belle Epoque.

Los mejores críticos de la obra la consideran como unainstantánea fotográfica, pero no fue así, la escena fuetotalmente producida, cuidada, preparada por Degas. La crítica dela época la despreció por considerarla divulgativa de laprostitución, el alcoholismo y los vagabundos. Zalacaín llegó alas oficinas de su amigo quien le mostró el recién inauguradohostal, verdaderamente con vistas espectaculares.

La suite de la esquina, con ventanas a todo lo alto permitíanadentrarse en Plaza de España y casi tocar el Teatro Real. Suamigo había preparado un desayuno castellano, churros, porras,chocolate, anís extra seco para él y orujo blanco para elaventurero quien le contó de las nuevas tendencias gastronómicasde Londres.

Y vaya sorpresa, el amigo mostró un artículo de un sitio ainaugurarse en unos días y donde se presentará la fusión de lacocina japonesa con la mexicana, el nombre lo dice todo“Peyote-San”.

Un artículo mostraba un adelanto de la oferta gastronómica:“Para la cruda realidad, chilaquiles verdes picantitos con pollode corral, crema y queso fresco”, además se ofrecerán huevosdivorciados, rancheros, tamales, unos buñuelos de pulpo llamado“takoyaki”, “gyozas de pollo fritas con salsa dechilpotle”, “chalupitas de plátano macho”, carnitas de cerdoibérico y algo cuyo nombre resulta prometedor: “Te rompo loshuevos…”.

En la cocina se dan cita y fusionan conceptos Hugo Muñoz,formado en Kabuki y KaButo Kaji; y Santi Aroca ex del PuntoMx, conuna estrella Michelin a cuestas junto con Roberto Velázquez elexitoso chef mexicano asentado en Madrid.

Habría de reservar, le dijo Zalacaín a su amigo mientraselevaba la copa de orujo blanco, gallego, por supuesto.

elrincondezalacain@gamil.com Video en:https://youtu.be/JTP8c8eh718