¿Dejas de hacer cosas por miedo al rechazo? | CONSTRUYENDO MI FELICIDAD

“Las personas sanas sanan, las personas heridas hieren”

MARA RODRÍGUEZ MASDEFIOL / Psicóloga tanatoterapeuta*

  · lunes 22 de octubre de 2018

¿Algunas veces sueles sentirte rechazado por los demás?, ¿sientes que no tienes derecho a la vida o te preguntas para qué vives?, ¿has llegado a sentir un fuerte vacío interior que no entiendes por qué?, ¿vives o has vivido momentos de depresión sin motivo alguno? Sigue leyendo... podría ser que vivas en algún grado esta herida.

HERIDA DEL RECHAZO

Máscara que usa: del huidizo

¿QUÉ ES EL RECHAZO?

La herida del rechazo es muy profunda, quien la sufre siente rechazo en su interior y a su derecho a existir. Está presente desde muy temprana edad. Esta herida se vive desde el nacimiento o incluso antes de nacer, o en el primer año de vida. Siente que no tiene derecho a existir y se provoca con el progenitor del mismo sexo. Esta persona todo lo interpreta a través de los filtros de su herida, sintiéndose rechazado, aún cuando no lo sea.

¿Qué hace que una madre no reciba bien u odie a su hijo?

Quizás una madre que tiene cerrado su corazón por anteriores rechazos a su amor, o quizás un hijo no deseado o que es el resultado de una violación, enfermedad mental o de vivir en una relación familiar patológica; quizás odio a la pareja, que se transfiere al hijo, una problemática socioeconómica severa, el estar en depresión o repite el patrón familiar de cómo ser mamá. También circunstancias como catástrofes ambientales, guerras, necesidad de hospitalizar al bebé o a la madre, y todo eso es percibido por el bebé como amenazante para su integridad.

Si se experimenta esta herida, el cuerpo suele ser contraído, angosto, delgado o fragmentado, no desea ocupar mucho lugar, sus ojos suelen ser pequeños, atemorizados o con la impresión de llevar un antifaz, evita el contacto y la relación con el mundo.

Su caracter se distingue por ser perfeccionista, desapegado a lo material, intelectual, es una persona que pasa de fases de gran amor a otras de odio profundo. Cree en lo más profundo de su ser que no tiene derecho a existir. Se cree inexistente, carente de valor. Procura la soledad, tiene la capacidad de hacerse invisible, y siempre busca los medios para huir de situaciones que le puedan producir pánico. Se deslinda del mundo, crea su propio mundo, lo que algunas personas pueden creer que presenta rasgos esquizofrenicos. Suele sentirse incomprendido y su temor más grande es el pánico. Vive mucho miedo, orgullo (no necesito de nadie, no necesito ser bienvenido), negación del dolor y anhelo de ser sentido y amado, se jura a sí mismo que nadie va a volver a rechazarlo.

El que vive la herida del rechazo suele tener poco apetito para comer, por las emociones o el temor, ingiere porciones pequeñas, y una forma de huir de su realidad es ingiriendo drogas o alcohol, también puede presentar trastornos de alimentación como anorexia. Toma una actitud de superioridad, suele ser despistado.

Tiende a sufrir crisis de ansiedad de pánicos, fobias, depresión, ideación suicida. Problemas en articulaciones, huesos, respiratorios, escoliosis severa. Suele enfermarse de diarrea, arritmias, cáncer, alergias, vómito, desmayos, estado de coma, hipoglucemia, diabetes, tienden al suicidio, psicosis. Suelen tener problemas cutáneos.

El huidizo alimenta su herida cada vez que se siente nulo, bueno para nada y cada vez que huye de una situación.

Para sanar, el huidizo tiene que ocupar su lugar y reafirmarse quién es, tiene que entender que “si alguien se olvida de mí, no me siento incómodo”. Debe expresar: “tengo derecho a existir”.

ASPECTOS POSITIVOS DE LA MÁSCARA

  • Es capaz de asumir muchas responsabilidades.
  • Es espabilado, creativo, con mucha imaginación, sensible, creativo, genial, brillante, pensador, innovador, imaginativo, artístico, espiritual.
  • Apto para actuar en la medida que se requiera incluso urgentemente.
  • Sin necesidad de otros, si se aparta se siente bien solo.

Si reconoces que vives una o varias de estas características puedes tener la herida del rechazo en mayor o menor grado, no te angusties, puedes trabajarla y aprender a percibir la vida de otra manera. Recuerda que vemos o percibimos la vida de acuerdo a nuestra historia de vida o nuestras heridas. Pero no es que deba ser de esa manera, y algo importante que obtienes al trabajar tu herida, es que empiezas a percibir tu vida de otra manera más sana, objetiva y feliz.

*Contacto: Teléfono: 2221199224

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