¿Es saludable que los niños sean vegetarianos?

Si decides que tus hijos lleven una dieta sin carnes debe ser supervisada por un especialista para evitar problemas de salud

Mary Carmen M. Ávila | El Sol de Puebla

  · lunes 20 de abril de 2020

FOTO: Cortesía Freepik

Desde hace varios años el tema del vegetarianismo es de creciente interés entre la población. Es una forma de alimentación basada principalmente en alimentos de origen vegetal como: verduras, frutas, cereales, leguminosas, oleaginosas (cacahuate, nuez, almendra, por citar algunas) y otras grasas vegetales como el aguacate y en ocasiones -dependiendo del tipo de vegetarianismo- algunos derivados de alimentos de origen animal como la leche, quesos y yogurt, huevo y ocasionalmente algunas carnes.

Existen muchas razones por las que una familia se puede convertir a esta práctica, muchos lo hacen por respeto a los animales, otros por alguna creencia religiosa y muchos más por tener una dieta más saludable, pero ¿es bueno que lo niños lo sean?

“Existe evidencia científica que constata que los infantes con una alimentación vegetariana presentan menores índices de obesidad, tienen cifras de colesterol LDL (colesterol malo) y VLDL menores que los niños no vegetarianos, menor frecuencia de enfermedades cardiovasculares, hipertensión y diabetes tipo 2”, afirma Laura Karina Barba Martínez, maestra en Nutrición Clínica.

Por otra parte, asegura que pueden presentar algunas deficiencias en oligoelementos como hierro, calcio y zinc, deficiencias de vitamina D y de aminoácidos esenciales por un consumo bajo o insuficiente de proteínas de alto valor biológico, índices de talla y peso bajos con respecto a la referencia para la edad, dependiendo del tipo de dieta vegetariana que se les proporciona.

¿PUEDEN PRACTICARLO SIN ALGÚN DAÑO EN LA SALUD?

“Los niños que llevan este tipo de alimentación generalmente no es por elección, sino por alguna indicación médica, nutricional o porque sus cuidadores decidieron adoptar esta forma de alimentarse y se lo han enseñado así”, asegura la especialista, sin embargo, es muy importante que los menores que llevan una alimentación vegetariana -en cualquiera de las formas- tengan un seguimiento nutricional adecuado y frecuente para valorar si se está cumpliendo con los requerimientos diarios de kilocalorías, proteínas, vitaminas y oligolementos, esto ayudará a evitar problemas de salud derivados de alguna carencia nutricional.

LOS BENEFICIOS EN LA SALUD

· Prevención de enfermedades: esto se debe a un alto consumo de fitonutrimentos, nutrimentos presentes en los vegetales, los que les dan el color y olor característico, mismos que protegen al organismo contra padecimientos como el cáncer por el alto aporte de carotenos, licopeno, antocianinas, etcétera.

· Elimina otros problemas: el consumo de fibra –en una cantidad adecuada y saludable-, evita problemas de estreñimiento, sobrepeso, obesidad y la alteración de los niveles de glucosa, colesterol y triglicéridos en la sangre.

LA DIETA

De acuerdo con la nutrióloga, es importante que la alimentación principalmente debe de cumplir con las leyes de una dieta correcta:

· Adecuada: a las necesidades nutrimentales.

· Variada: con respecto a la diversidad de alimentos diariamente.

· Completa: que contenga de todos los grupos de comestibles.

· Suficiente: para satisfacer los requerimientos diarios de nutrimentos.

· Inocua: que esté libre de sustancias que puedan hacer que el organismo se enferme.

· Equilibrada: que tenga la proporción adecuada de macronutrimentos como proteínas, grasas e hidratos de carbono. Para esto es recomendable acudir con un nutriólogo que valore y determine si la dieta está cumpliendo con estas características.

LOS NUTRIENTES ESENCIALES

“Los aminoácidos son los pequeños eslabones de una cadena grande llamada proteína, estos son de dos tipos: esenciales, es decir que nuestro cuerpo no los puede producir y es necesario consumirlos en los alimentos y no esenciales, que el cuerpo sí puede producirlos”, comenta Barba Martínez. Se debe tener especial cuidado en el aporte de aminoácidos esenciales que se encuentran en los suministros de origen animal, por lo que, al restringirlos, es necesario hacer la combinación de cereales (arroz, maíz y otros) con leguminosas (frijol, lenteja, haba, garbanzo) para asegurar el aporte de dichos nutrimentos.

Cabe señalar que es necesario, con frecuencia, el uso de suplementos de hierro, calcio, zinc, ácidos grasos y vitaminas para asegurar un aporte suficiente, siempre que el nutriólogo lo indique con base en la valoración individualizada que realice.

Finalmente, Karina hace hincapié en que tomar la decisión de llevar una dieta vegetariana, en cualquiera de sus formas, debe ser apoyada y asesorada preferentemente por un especialista para que realice el cálculo de los requerimientos diarios y asegure el aporte de los nutrimentos esenciales para evitar estados carenciales que puedan afectar tu salud.