Lo que realmente de vida a una compañía u organización (laboral, social, familiar, etc.) son sus integrantes, ya que su desempeño, sus ideas, su trabajo y su entusiasmo, proporcionan el movimiento necesario para llevar a la realidad los objetivos de la misma.

Las empresas necesitan líderes que motiven a su personal y tengan la capacidad de influenciar a los demás de manera positiva.

Pero también se necesitan líderes sociales y familiares, que llenen ese gran vacío de autoridad y liderazgo que existe en muchos hogares, lo que ha generado familias disfuncionales en las que cada integrante vive en su mundo o “como se le da la gana”.

¿Cómo ser un buen líder?

“El dirigente, el guía, ese ser del que se oyen hazañas extraordinarias no es un extraterrestre ni un ente sobrenatural”, asegura el psicólogo Hugo Reyes Carrasco, Consultor en Desarrollo Humano, “es un ‘Líder Transformador’ que se siente comprometido por modelar el futuro de su organización, el de sus colaboradores, el de su familia y el suyo propio”, afirma y agrega: “alguien que como romántico de la adversidad, encuentra sentido en la crisis y sabe que es mejor señalar destinos en donde encontrar respuestas, que naufragar en océanos de tranquilidad”.

¿Qué es un Líder Transformador? “Es quien utiliza el carisma, el trato individual y el mejoramiento intelectual para dirigir y promover el desarrollo integral de sus colaboradores y de la organización” subraya el consultor.

EL CARISMA

Una persona carismática es capaz de ilusionar y entusiasmar a los demás con argumentos más allá de la lógica racional; tiene la capacidad de impactar, convencer, asociar y arrastrar, esto es, despertar en su equipo sentimientos de integración y deseos de imitación.

“El líder carismático establece objetivos claros que estimulan a su equipo, haciéndolos depositarios activos de sus propias convicciones y planes” dice el psicólogo, “para ello los sensibiliza sobre la importancia de su contribución personal y de su responsabilidad con una misma misión”.

TRATO INDIVIDUAL

No todas las personas somos iguales, cada uno de nosotros quiere, siente y piensa de manera diferente y de acuerdo a sus creencias, cultura, intereses, familia, medio ambiente, etcétera, es decir, cada quien tiene en su naturaleza características diferentes, su propia identidad.

“El líder transformador es sensible a estas diferencias y sabe tratar a cada colaborador según sus características personales”, asegura el entrevistado, “emplea equidad y no la igualdad en la relación con sus seguidores”.

MEJORAMIENTO INTELECTUAL

“No es cuestión de trabajar más, sino de trabajar inteligentemente”, enfatizó el consultor.

El líder transformador estimula la máxima realización de sus seguidores dentro de los objetivos de la organización (laboral, social, familiar, etc.); destaca la importancia de ser pro-activo (anticiparse a los acontecimientos) en lugar de ser reactivo (actuar después), “con ello adquieren un mayor protagonismo la creatividad e innovación”, subrayó.

UNA NUEVA DIMENSIÓN

Al potenciar nuestras capacidades y prepararnos para dar respuesta a las situaciones cambiantes, aprovechamos nuestra racionalidad y la reforzamos con la inspiración de nuestras emociones (utilizamos los dos hemisferios cerebrales).

Este enfoque de creatividad y razonamiento, facilita el aprovechamiento de nuestras capacidades y talentos, en busca nuestra realización profesional y personal.

“Construyamos nuestro futuro sabiendo que es allí donde pasaremos el resto de nuestra vida”, concluyó Hugo Reyes.

CONTACTO

Psicólogo Hugo Reyes Carrasco

Consultor en Desarrollo Humano

Móvil: 2221-839915