Fósiles en Valsequillo | DESCUBRIENDO CON PACO NORIEGA

Redacción

  · martes 14 de febrero de 2017

Foto: Paco Noriega

Hola compañeros lectores, ¿cómo están? Espero que seencuentren  bien y que estén haciendo lo que más les guste.

Esta vez les voy a contar algo muy padre e inesperado que nospasó a mi primo Eugenio y a mí hace unos días un sábadocualquiera.

Él tiene una casita de campo en Valsequillo y seguido vamos aandar en bici, caminar, pasear a los perros y muchas cosas así ynormalmente terminamos haciendo asados. En uno de esos asadosalguien comentó que había leído una nota en internet sobre quehabían encontrado los restos humanos más antiguos de la historiaen esta zona de valsequillo, lo que había provocado una confusióny polémica a nivel mundial ya que según los estudios que lesrealizaron eran los restos humanos más antiguos jamásencontrados. Esta persona más o menos nos dijo el sitio por dondelos habían encontrado y  tomamos nota para ir a buscar algo.

Al siguiente fin de semana nos fuimos tempranito haciavalsequillo a intentar encontrar algo sobre lo que habíamosescuchado una semana antes. Caminamos por varios lugares, unasbarrancas, unos lechos de ríos ya secos, a orilla del lago,subimos algunos cerritos y no encontramos nada.

Estábamos un poco frustrados porque no encontramos nada de loque fuimos a buscar, aunque sí sorprendidos por la gran cantidadde aves que vimos, una que otra serpiente y un interesantenacimiento de agua cristalina al que no pudimos decirle que no ynos echamos un pequeño chapuzón para calmar el calor. Ya despuésde haber pasado gran parte del día recorriendo esa zona decidimosir hacia la famosa panga a tomar una cervecita en alguna tienda depor allá. Aun seguíamos con “la frustración” de no haberencontrado nada, preguntamos a la gente que encontrábamos sisabían algo y nos contestaron que no. Cuando ya nos disponíamos airnos, Eugenio le preguntó a unos chamaquitos que pasaron por ahísi no sabían algo con respecto a eso, nos dijeron que no sabíannada, pero que el señor que vivía en esa casa (señalando con eldedo la casa) sabía mucho de eso, que él nos podría ayudar.

Tocamos el timbre para preguntar si ahí nos podrían deciralgo. Nos abrió la puerta una señora muy amable de nombre Aleidale comentamos lo que estábamos buscando y muy sorprendida nos dijoque en efecto, que cerca de ahí habían encontrado unos restoshumanos antiguos, pero no nada más eso, sino que muchas cosasmás, su papá es uno de los que han descubierto muchas cosas ahí.Nos contó que su papá ya es una persona mayor y que por elmomento no nos podía atender pero que si le hablábamos otro díacon gusto podíamos platicar con él y preguntarle muchas cosas.Intercambiamos teléfonos y nos despedimos diciéndole que losbuscaríamos.

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EXPLORADOR POR NATURALEZA

Pasaron unos días y finalmente me puse en contacto con ellapara acordar la cita e ir visitarlos en busca de información.Finalmente llegó el día y nos vimos en su casa, ahí estaba supapá, Don Moisés Cabrera Huerta sentado en una silla tomando elsol, con un gorro tejido de estambre para taparse el frío en lacabeza y unos lentes de mica amarilla para protegerse del sol, mepresento con él y empezamos a platicar. Don Moisés nació enXalapa, Veracruz, allá por el año de 1920 y desde muy niño sevino para Puebla a vivir cerca de Valsequillo más exactos enCaulapan. Él es de oficio panadero y siempre trabajó y luchó porsu familia, así les pudo dar techo, alimento y educación a sushijos. Me  contaba que desde niño le gustaba hacer agujeros paraver qué aparecía y así través de los años fue encontrando ycoleccionando cosas muy importantes.  Me relataba que después determinar de chambear se iba al campo a ver que encontraba, muchasde las cosas que encontró en el lago era justamente cuando lapresa bajaba de nivel, ahí aprovechaba para hacer largas caminatasmirando el suelo y las paredes del lago para encontrar algo que lellamara  la atención para empezar a rascar. Así encontrócolmillos, restos de camellos, caballos, roedores, aves y muchascosas más con una antigüedad de miles de años, al preguntarlecuál había sido su mayor hallazgo, sin dudarlo me respondió quelos colmillos de mamut, miden más de 3 metros de longitud y en sucasa tiene unas réplicas de ellos que el museo al que se los donóse los regalaron. Me llamaron mucho la atención sus manos, dedoslargos y afilados en forma de garras, no cabe duda que ya veníadiseñado para hacer eso.

Es un hombre muy generoso ya que la mayoría de lo que encontrólo donó a museos, universidades e instituciones, en su casaconserva aún muchas cosas pero nada como lo que encontró a lolargo de su vida. Alguna vez, me contó, llegaron“coleccionistas” y aprovechando que no había nadie se metierona su casa y robaron cosas valiosísimas de importancia mundial.

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UNA AGRADABLE SORPRESA

Seguíamos platicando cuando llegó una persona queinmediatamente reconocí, era el conocido Vulcanólogo poblano,Alejandro Rivera, yo lo conocía porque muchas veces lo vi en latele haciendo capsulas informativas sobre nuestros volcanes. Meexplicó que Aleida lo había invitado porque él y Moisés sonamigos y se tienen admiración mutua y que me podía ayudar enalgunos datos o recordatorios. En verdad yo estaba muy animadoporque acababa de conocer a 2 personalidades que conocen muy bienla zona (entre otras muchas cosas) y me iban a ayudar a desarrollarmejor este reportaje.

Alejandro me siguió contando anécdotas de Moisés y variascosas más, me decía que Moisés tiene un don para encontrarhuesos, que rápidamente los podía hallar.

Muchas personalidades reconocidas internacionalmente buscaban aMoisés para pedirle información sobre esa zona, un ejemplo deello es que el Dr. Brunet, director del Museo de Historia Naturalen París, que es una autoridad mundial en fósiles, es amigo deMoisés y en ocasiones lo consulta sobre algunos temas y/ohallazgos. Nos explicaba Moisés cómo había que desenterrar lascosas halladas, una vez que encuentras algo empiezas a rascar aunos 20 cm aprox alrededor del objeto, esto con el fin de conservary poder estudiar la pieza a detenimiento. Nos mostró algunos desus reconocimientos, huesos, piedras, y fósiles que encontró a lolargo de su vida, amablemente nos pidió que lo dejáramos tomar lasiesta porque tenía que descansar porque al día siguiente se ibacon Aleida a Chachalacas a nadar para cruzar el río y llegar almar… ¡¡Qué tal!

Alejandro y yo nos quedamos mirando sorprendidos por lo que ibaa realizar, nos reímos y nos despedimos de él y le deseamossuerte en su intento, obviamente lo cumplió.

Alejandro y yo nos quedamos platicando un poco más de Moisés,me hizo mucho hincapié en que era referencia mundial sobre estazona y que en verdad había encontrado muchas cosas interesantes alo largo de su vida.

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LA IMPORTANCIA DE VALSEQUILLO

Alejandro me empezó a platicar de lo importante de la zona deValsequillo, la importancia que tiene a nivel mundial ya que en el2011 fue declarada zona Ramsar, me explicó que ahí mismo seencontró un cráneo humano con una antigüedad de aproximada de80,000 años, lo que está en contra de las teorías de que elhombre llegó a la tierra hace 60, 000 años, definitivamente esuna polémica internacional.

Han encontrado restos de camellos de entre 40,000 y 10,000 añosde antigüedad, molares de mastodontes, pinturas rupestres y 19especies fósiles de megafauna.

Me contaba que también en esa zona existen más de 22 volcanes,108 especies de invertebrados, 8 especies de anfibios, 36 especiesde reptiles, 242 de aves (en la República hay 1096), 97 demamíferos y 18 de peces. Ahora con mayor razón entendí laimportancia de esta zona.

En pocas palabras es un arrecife de fósiles del cretáceo (175,000,000 de años). También me contaba que es una zona demigración de aves de Centro y Norte América, la zona mideaproximadamente 150 km2 y que es un tesoro que debemosconservar.

Alejandro es una persona que conoce y quiere mucho esta zona,usa una frase que me gustó: “Debemos mejorar el vínculo de laspersonas con su entorno”, ya que en esta zona Ramsar existencasas y construcciones que no deberían de estar ahí, perjudicanel entorno.

El cree que se podrían hacer paradores turísticos que integrena los habitantes de la comunidad y hacer exploración, observaciónde aves, caminatas y muchas cosas más, la zona es muy rica yextensa para eso, como decíamos,  en cualquier parte de Europahacen estas cosas y con menos por observar y explorar.

Fue una charla muy enriquecedora y con mucha información, nosdespedimos y nos dimos un fuerte abrazo por habernos conocido yquedamos de hacer una caminata próximamente para ir a ver laspinturas rupestres y más cosas. Justo en ese momento me dijo quetiene un sitio en el Centro Histórico y es un café, se llama“Mamut” y está en la 2 Sur 1105, entre la 11 y la 13, sereúnen los miércoles a las 6:00 de la tarde diferentes personas aparticipar en pláticas o pequeñas conferencias sobre estos temasy algunos más, además de ponerse de acuerdo a dónde será lapróxima caminata, me dice que está abierto a toda la gente que leguste esto o que quiera aprender.

Yo personalmente los invito a que vayan, es una buenaoportunidad para descubrir nuevas cosas y hacer nuevos amigos.

¿A que no sabían tanta cosa interesante de la zona devalsequillo? Yo la verdad no.

Está bien compañeros lectores, espero que les haya gustadoeste relato y después les traigo más.

¡¡Saludos!!

paco_noriega2001@yahoo.com