Edificios emblemáticos de todo el mundo hoy se iluminan de color rosado porque se celebra el Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer de Mama, cuyo objetivo es crear consciencia sobre esta enfermedad y mostrar apoyo moral a las mujeres que la padecen.
Gracias a este apoyo considerable para la concientización sobre este padecimiento, la tasa de supervivencia ha aumentado y el número de muertes asociadas con la enfermedad disminuye constantemente; esto debido a factores como la detección temprana, al tratamiento personalizado y una mejor comprensión de la enfermedad.
“Pero esto todavía no es suficiente, en México el cáncer de mama es la segunda causa de muerte por cáncer. Más de 11 mil mujeres murieron en 2019, de las cuales solo en Puebla fallecieron 429”, expone Miguel Fuentes Blancas, máster en Patología Mamaria y Senología por la Universidad de Barcelona.
Y es que los conocimientos actuales sobre las causas del cáncer de mama son insuficientes, por eso la detección temprana sigue siendo fundamental en esta lucha, ya que cuando se detecta pronto, las posibilidades de curación son elevadas.
“La detección temprana del cáncer mamario permite que dos de cada tres mujeres con esta enfermedad sobrevivan hasta más de 20 años después de ser detectado”, advierte el médico.
Fuentes Blancas detalla que las mujeres en mayor riesgo de padecerlo son las que tienen entre 35 y los 50 años. Por ello es muy importante que todas las mujeres mayores de 15 años se hagan una autoexploración una vez al mes y en el caso de tener más de 40, se realicen una mastografía dos veces al año.
El médico señala que los principales factores de riesgo son el uso de hormonas, antecedentes familiares de cáncer, así como la obesidad y el tabaquismo; la primera estimula un aumento en la producción de hormonas por los ovarios que puede alterar tu metabolismo y el segundo ha estado relacionado con las alteraciones del ADN en los núcleos de células de rápida replicación, que incluyen las de las glándulas mamarias.
Mantener una buena salud a lo largo de la vida es fundamental para disminuir el riesgo de padecer cáncer de mama, por ello hacer ejercicio con regularidad y mantener un peso saludable pueden ayudar, así como evitar el consumo de alcohol.
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