/ viernes 2 de octubre de 2020

Pitón bola, una mascota para osados

¿Te gustan los reptiles y quisieras tener una en casa? Los expertos recomiendan a la pitón bola, no es venenosa y crece hasta medir 1.50 m aproximadamente

La pitón bola es una serpiente originaria de África que no es venenosa y tiene un temperamento tranquilo, esto la hace ideal para que la gente que ama los reptiles la tenga en casa. De acuerdo con Edgar Reina Ponce, médico veterinario director del Museo Viviente, aunque pertenece a la familia de los pitones esta serpiente no suele ser de gran tamaño.

Nace de unos 10 cm y llega a medir hasta 1.50 m, se considera adulta cuando mide unos 90 cm aproximadamente y llega a una etapa reproductiva a los tres años o un poco más, depende de las condiciones que se le ofrezcan en cautiverio.

Refiere que estos reptiles viven de 15 a 20 años en cautiverio. No son mascotas comunes, son animales ornamentales que no desarrollan un afecto por el dueño y se guían 100 por ciento por su instinto, así que para tener uno en casa hay que documentarse acerca de la especie.

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“Se recomiendan porque son pequeñas, el cuidado es relativamente fácil y no son agresivas. El dueño debe tener un conocimiento básico de sus necesidades, además de asesoría de un médico especialista en reptiles o de un herpetólogo que tenga el conocimiento de la tenencia de estos animales bajo el cuidado humano, porque requieren parámetros específicos de temperatura, humedad y alimentación”, expone.

Su mecanismo de defensa es enrollarse sobre sí mismas, por eso se le conoce como pitón bola. A pesar de ser tranquilas no soportan mucho la manipulación, así que olvídate de tenerla en tus brazos.

ACERCA DEL TERRARIO

El médico enfatiza que el terrario debe estar en un lugar sin cambios de temperatura, para que no le genere problemas respiratorios.

“Se recomienda que sus dimensiones sean como mínimo de 80 cm de largo por 40 cm de fondo y 40 cm de alto. Que sea de material térmico como madera y que contenga una fuente de calor. La ventilación puede ser malla y de frente tener cristal para que se observe. El sustrato se debe comprar porque debe ser estéril (se recomienda el peat moss) y se debe cambiar cada tres meses. Se debe revisar diariamente para retirarle las excretas y la orina de manera inmediata”, advierte.

Por dentro se recomienda tener perchas (palos o troncos donde el animal se puede trepar y reposar), escondites, un bebedero con agua purificada que se cambia de 3 a 4 veces por semana. Se tiene que rociar para generar una humedad aproximada de un 60 a 80% por ciento.

¿QUÉ COMEN?

La pitón bola se alimenta de pequeños roedores, cada semana o hasta cada 15 días, en una proporción al 10% de su peso. El alimento se le ofrece recién sacrificado.

LAS FASES

Su color normal es negro con tonos cafés a dorados, pero podemos encontrar una amplia diversidad de colores que se dan al reproducirla por selección genética en cautiverio: albina, leucística, banana clown y muchos más; el precio varía desde los 2 mil hasta 30 o 40 mil pesos, según la fase de la serpiente que adquieras.

CUIDADOS MÉDICOS

Se recomienda desparasitarlos cada 6 meses a un año, según el estado del animal. Cada tres meses se les hace un chequeo de rutina con el médico veterinario. Se pueden enfermar de neumonía, parasitosis, infecciones intestinales y enfermedades en la piel.

“La serpiente pitón es un animal de fauna silvestre que requiere procedencia legal para tenerla en casa. La tienda donde la compres te debe dar la nota o factura con los permisos necesarios”, concluye.

La pitón bola es una serpiente originaria de África que no es venenosa y tiene un temperamento tranquilo, esto la hace ideal para que la gente que ama los reptiles la tenga en casa. De acuerdo con Edgar Reina Ponce, médico veterinario director del Museo Viviente, aunque pertenece a la familia de los pitones esta serpiente no suele ser de gran tamaño.

Nace de unos 10 cm y llega a medir hasta 1.50 m, se considera adulta cuando mide unos 90 cm aproximadamente y llega a una etapa reproductiva a los tres años o un poco más, depende de las condiciones que se le ofrezcan en cautiverio.

Refiere que estos reptiles viven de 15 a 20 años en cautiverio. No son mascotas comunes, son animales ornamentales que no desarrollan un afecto por el dueño y se guían 100 por ciento por su instinto, así que para tener uno en casa hay que documentarse acerca de la especie.

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“Se recomiendan porque son pequeñas, el cuidado es relativamente fácil y no son agresivas. El dueño debe tener un conocimiento básico de sus necesidades, además de asesoría de un médico especialista en reptiles o de un herpetólogo que tenga el conocimiento de la tenencia de estos animales bajo el cuidado humano, porque requieren parámetros específicos de temperatura, humedad y alimentación”, expone.

Su mecanismo de defensa es enrollarse sobre sí mismas, por eso se le conoce como pitón bola. A pesar de ser tranquilas no soportan mucho la manipulación, así que olvídate de tenerla en tus brazos.

ACERCA DEL TERRARIO

El médico enfatiza que el terrario debe estar en un lugar sin cambios de temperatura, para que no le genere problemas respiratorios.

“Se recomienda que sus dimensiones sean como mínimo de 80 cm de largo por 40 cm de fondo y 40 cm de alto. Que sea de material térmico como madera y que contenga una fuente de calor. La ventilación puede ser malla y de frente tener cristal para que se observe. El sustrato se debe comprar porque debe ser estéril (se recomienda el peat moss) y se debe cambiar cada tres meses. Se debe revisar diariamente para retirarle las excretas y la orina de manera inmediata”, advierte.

Por dentro se recomienda tener perchas (palos o troncos donde el animal se puede trepar y reposar), escondites, un bebedero con agua purificada que se cambia de 3 a 4 veces por semana. Se tiene que rociar para generar una humedad aproximada de un 60 a 80% por ciento.

¿QUÉ COMEN?

La pitón bola se alimenta de pequeños roedores, cada semana o hasta cada 15 días, en una proporción al 10% de su peso. El alimento se le ofrece recién sacrificado.

LAS FASES

Su color normal es negro con tonos cafés a dorados, pero podemos encontrar una amplia diversidad de colores que se dan al reproducirla por selección genética en cautiverio: albina, leucística, banana clown y muchos más; el precio varía desde los 2 mil hasta 30 o 40 mil pesos, según la fase de la serpiente que adquieras.

CUIDADOS MÉDICOS

Se recomienda desparasitarlos cada 6 meses a un año, según el estado del animal. Cada tres meses se les hace un chequeo de rutina con el médico veterinario. Se pueden enfermar de neumonía, parasitosis, infecciones intestinales y enfermedades en la piel.

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