La llegada del verano invita a lucir prendas escotadas, que muestran más centímetros de piel, lo que significa que escote debe estar listo, como mínimo exfoliado e hidratado.
La piel del escote es más fina, tiene menos fibras de colágeno y elastina que la de otras partes del cuerpo, por lo que suele ser una zona en la que se instalan cómodamente arrugas y manchas. No tiene compartimentos grasos, lo que provoca que pierda densidad y se arrugue con mucha facilidad.
A partir de los 35 años la deshidratación, la sobreexposición solar evidente y la acumulación de radiación solar comienzan a pasar factura y propician la aparición de arrugas, flacidez, manchas o rojeces. Esta zona del cuerpo es una de las primeras en envejecer.
En casa, se puede empezar por exfoliar la zona de cuello y escote, y luego aplicar hidratación específica de Guerlain como la gama de Orchidée Impériale, una crema de textura ligera que, gracias a la goma de Tara y el alga roja que contiene en su fórmula, se funda con la piel y forma una malla.