Cuando las mujeres tenemos una boda en puerta como invitadas, siempre se entra en el dilema de ¿qué usar? Y seguramente conozcas una regla de oro para este tipo de eventos, que, por supuesto es “nunca usar blanco”, pero ¿sabías que existe otro color que seguramente podría ganarte miradas de desaprobación por parte de los demás invitados?
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Lo creas o no, algunas personas tienen la creencia que el rojo es otro color que no puedes vestir en un enlace nupcial, pero ¿cuál es el motivo y qué tan cierto es este mito? En esta nota te lo explicamos.
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El rojo y su significado
De acuerdo con el simbolismo y la psicología, el color rojo siempre ha sido asociado con el amor, pero también con la pasión, el poder, la fuerza, la sangre y la lujuria, incluso en el mundo de la moda, la elección de este tono representa una decisión segura y audaz que puede hacerte destacar.
No obstante, en algunas culturas llevar rojo a una boda no es bien visto, esto debido a que, al ser un tono bastante llamativo podría provocar el desvío de las miradas y la atención de los protagonistas de la celebración: los recién casados, incluso que podría opacar a la novia.
El motivo por el que se cree que no se puede acudir de rojo a una boda
La controversia en torno a la pregunta si se puede asistir de rojo a una boda, viene más de las reglas sociales que han sido transmitidas de generación en generación, y se trata más bien de un mito tradicional en el que se cree que el color encarna "lujuria y seducción".
Por otra parte, otro de los argumentos que van en contra de llevar este tipo de tono en la vestimenta, en un evento de este tipo, se basa en que el rojo parece decir "mírame" en un momento en el que toda la atención debería estar en la pareja. En este sentido, se ha sugerido que usar rojo en una boda podría interpretarse como una falta de respeto hacia la novia, ya que este color podría llamar demasiado la atención y eclipsarla en su día especial.
Otro de los motivos que gira en torno a este mito, tiene que ver con “una aventura”, pues de acuerdo con el podcast "The Unfiltered Bride", en el que las wedding planners Georgie Mitchell y Bethany Smith discutieron este antiguo mito que rodea al vestido rojo en las bodas, señalaron que, según la tradición, si una invitada se viste de rojo, se cree que ha tenido una relación íntima con el novio.
Finalmente, esta ideología también tiene fundamentos en las leyes y costumbres de otros países, donde usar el rojo sí podría representar una falta de respeto hacia los novios, pues en algunas culturas como la india, la pakistaní y la china, o en religiones como el hinduismo, esta tonalidad juega un papel importante en las ceremonias nupciales, pues al simbolizar el amor, el compromiso y la prosperidad, es un color que suelen llevar los novios.
Si bien, todo lo que se ha mencionado en torno a esta superstición, puede parecer absurdo o escucharse un poco ridículo, lo cierto es que, en la actualidad, tiene raíces profundas en la cultura popular y en las normas sociales del pasado.
¿Cómo llevar el rojo a una boda?
Si bien, el color rojo no debería de representar un problema para llevarlo en una boda, lo cierto es que todo dependerá del código de vestimenta del evento, o bien, que el atuendo se elija con buen gusto y elegancia, sin rayar en lo vulgar o en lo excesivamente llamativo.
Si verificas los protocolos del evento y no hay un código de vestimenta que te lo prohíba, y decides llevar un vestido rojo, existen algunos consejos que puedes tomar en cuenta para portar un atiendo de esta tonalidad, de manera adecuada:
Accesorios neutros: Al ser un color llamativo, lo mejor será equilibrar la imagen y mantener los accesorios en un tono bastante neutro, como tacones nude y un clutch color champán.
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Diseño Sofisticado: Lo mejor será elegir un diseño que sea elegante y apropiado para la ocasión; para esto es importa te evitar los cortes demasiado provocativos o los diseños demasiado llamativos.