Son muchos los factores que intervienen en la construcción de una buena comunicación. El dominio de la palabra es uno de ellos. Por lo que la preparación, la práctica y el dominio del tema, son elementos primordiales para desarrollar el arte de hablar en público.
Dice la frase: “quien tenga la palabra como recurso será el más fuerte, sólo hay que saber cómo utilizarla.” Es por ello que existen metodologías y herramientas muy efectivas para hablar con impacto.
En un tema como este, la preparación se vuelve un recurso vital para dar una presentación efectiva. Por lo tanto, toma nota de estas recomendaciones.
Leer tu presentación
Como parte de sentirte seguro al hablar, un consejo importante es que leas y releas tu presentación previamente. Puedes hacerlo en silencio y en otras ocasiones en voz alta. A través de esto le tomarás mayor sentido a lo que dices y podrás corregir ciertos aspectos de tu presentación.
Ensayar frente al espejo
Se dice que Hitler antes de dar un discurso ante miles de personas, ensayaba frente a un espejo por horas. El practicar frente al espejo te brinda la oportunidad de observar tus gestos, postura, expresiones faciales u otros distractores.
Grábate
Con todos los recursos tecnológicos que tenemos a la mano, te recomiendo grabarte con un Ipad o, lo que es mejor, con una cámara de video. Esto te servirá para corregir los puntos en los que dudes o parezcas inseguro. Anota los errores que percibas. Si puedes mostrarle esto a otra persona que sea objetiva, mejor, como dicen “cuatro ojos ven mejor que dos”.
Respira para relajarte
Definitivamente la respiración es un arma poderosa para relajarnos y dar una imagen de tranquilidad y confianza. Te ayuda a desestresarte. Cuando estamos nerviosos nos olvidamos de respirar y esto estresa aún más. Por lo tanto, respira profundamente varias veces y suelta el aire lentamente hasta que logres tranquilizarte.
Hidrátate
Durante una presentación resulta primordial que estés hidratado para que se te escuche bien. Trata de que el agua esté a temperatura ambiente para no lastimarte la garganta.
Cuida el tiempo
Una de las cinco claves para hablar en público radica en ser breves al hablar. Es mejor dejar al auditorio con curiosidad por saber más de nuestro tema que cansarlos. Se dice que “menos es más”, por lo que se recomienda que al ensayar vayas tomando en cuenta el tiempo. Durante la presentación, es conveniente que alguien te señale el tiempo que te queda.
Genera una actitud positiva
Diversas investigaciones afirman que la mente humana sólo puede tener un pensamiento a la vez. De ti depende que este pensamiento sea positivo. Repetirte “Sí puedo, es fácil y lo voy a lograr” son afirmaciones que te ayudarán a generar confianza y poder personal.
Hablar en público de manera segura, poderosa y convincente te permite complementar la proyección de una buena imagen. Recuerda que al hablar, no solo es importante lo que dices; sino también cómo lo dices.
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