Por: Mara Rodríguez Masdefiol Tal vez deberíamos empezar conotra pregunta: “¿se puede recuperar la confianza perdidadespués de una infidelidad?” Sí, sí se puede. Muchísimoscasos de infidelidad he atendido en mi consultorio, porquelamentablemente es una situación muy común entre las parejas ypuedo asegurar que cuando estas llevan a cabo un trabajoterapéutico comprometido, sí es posible.
Cada quien puede tener sus propias creencias y posturas ante lainfidelidad y todas ser respetables, qué se yo… lo que sí sées que tarde o temprano explota la bomba porque la verdad nosoporta estar escondida y oculta en la obscuridad, y esa explosiónlo único que causa, no sólo en los dos amantes, sino en susrespectivas parejas, hijos, y otros miembros de la familia, esdolor, odio y una tremenda sensación de traición… muchísimo detodo ello, y para coronar esa desdicha, la inevitable pérdidatotal de la confianza.
Por fortuna es posible recuperarla. Para lograrlo, es necesarioque la pareja trabaje muy duro en la curación de los devastadoresefectos de esta experiencia. Es muy conveniente asistir a terapiade pareja, donde un profesional los apoye en este proceso. Lo queyo les recomendaré aquí no pretende suplir esa atenciónprofesional, sino ofrecer algunos lineamientos generales que ayudena lograr dicho objetivo.
Estas recomendaciones así como la terapia de pareja, seránefectivas solamente si ambos están realmente interesados en seguirjuntos y en trabajar para superar esta difícil situación.
Un factor muy importante para que la pareja logre superar todoese daño que la infidelidad causó, es que quien la cometiócomprenda todo el dolor y el enojo de su pareja. E insisto en estoporque con frecuencia encuentro en él/ella una actitud deindignación porque su pareja le reclama y le agrede.
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Hay que entender que todos nuestros actos y decisiones tienenconsecuencias y no nos queda más que asumirlas, nos guste o no, yque la vida funciona bajo una ley universal que dice: “todo actotiene una consecuencia”, o causa-efecto y con esto entendemos quelo que yo hago tiene una consecuencia la cual debo asumir, de esaley universal nadie se libra. Por eso hay que reflexionar muy bienen nuestros actos porque estos tienen una repercusión, ya seabuena para nosotros o no muy buena.
Ser maduros significa entender muy bien esta ley y hacernosresponsables de nuestros actos. Entonces, es primordial que quienfue infiel comprenda que lo que hizo no es algo ligero y sinimportancia para su pareja, sino todo lo contrario y que estasiente mucho dolor y enojo. Por tal motivo tiene que“aguantarle” los reclamos y expresiones de enojo. ¿Por cuántotiempo? Pues el que duren.
Normalmente en el proceso de terapia se le ayuda a la personatraicionada a expresar su enojo y todos sus sentimientos, con lastécnicas y herramientas que el terapeuta maneja, esto sin dudaalguna le ayudará de manera muy efectiva.
Por otra parte, no es de extrañar que la persona traicionadahaya perdido la confianza y que por algún tiempo, que varía deacuerdo a la personalidad de cada quien, desconfíe de todo lo quesu pareja le dice. Si va a trabajar duda de que realmente estéallá, si sale de su casa a cualquier asunto, teme que haya ido aver a su amante, si habla por teléfono, piensa que está hablandocon él/ella.
Esta pérdida de confianza es normal, si le estuvo mintiendodurante todo el tiempo en que duró la relación.
Entonces, quien fue infiel debe tener la disposición de ayudara su pareja a superar su desconfianza. Una forma efectiva es queambos lleguen a acuerdos con respecto a esto. De acuerdo aactividades de la pareja, se pueden establecer para ayudar arecuperar la confianza perdida. Por ejemplo, el infiel, secompromete a llamarle cada cierto tiempo para aquietar sus dudas.Se requiere de mucha disposición y comprensión, paciencia yamor.
O tal vez acuerden que su pareja lo acompañe a todos loslugares a donde sea posible llevarlo, o quizá decidan fijarhorarios para llegar a casa después del trabajo, o comer juntostodos los días, etc.
Y estos acuerdos durarán el tiempo que considerennecesario.
Hay muchas alternativas, con base en las costumbres yactividades que puedan compartir para recuperar la confianzaperdida. Cuando los miembros de una pareja se aman y desean seguirjuntos, quien fue infiel está dispuesto a hacer todas estas cosasy “aguantar” todo lo que sea necesario, cuando ha comprendidoque lo que hizo es lo que ha generado todo ese desasosiego yrevolución en su vida cotidiana.
Y quizás lo más importante sea que el infiel se comprometahonestamente, consigo mismo y con su pareja, a no repetir lahistoria. Ser fiel o infiel es una decisión, así como amar o noamar a una persona; como adultos y ejerciendo nuestro librealbedrío, elegimos lo uno o lo otro. Si alguien no puedecomprometerse a ser fiel, está en todo su derecho de saber que lahistoria se seguirá repitiendo, y con base en esa realidad, podrátomar sus decisiones.
Si hay amor y voluntad de estar juntos, las secuelas de unainfidelidad se pueden superar. Si no hay lo uno o lo otro, seráimposible. Es decisión de cada pareja elegir hacia dónde quierencaminar, pero para esto debe uno hacer consciencia de qué es loque quiere en la vida a futuro y qué tiene que hacer en elpresente para lograrlo eso que busca tener.
Recuerda que en la vida debe uno cerrar ciclos y abrir nuevos, yen el caso de una infidelidad, puedo decidir si quiero cerrar elciclo y seguir solo, porque eso es lo mejor para mí, o cerrar eseciclo que ya no me funciona y empezar uno nuevo incluyendo a esapersona con la que quiero compartir el resto de mi vida.
Es tu decisión, analízala muy bien desde lo que tú eres y loque quieres.
* Tanatoterapeuta, trabajos con pérdidas, duelos,angeloterapia. Niños, adolescentes y adultos. Teléfono:2221199224
