Como es tradición, el Museo Amparo ofreció una monumental rosca para amigos y visitantes a través de un fabuloso convivio al que asistieron cerca de seiscientas personas.
Los infaltables Reyes Magos se hicieron presentes en el evento para alegrar los corazones de los pequeños de la casa con globos y lindos juguetes para todos.
El grupo N´scena amenizó la velada con tradicionales villancicos mientras se partía la Rosca de Reyes y los asistentes la disfrutaban con un rico chocolate caliente.
Este año Maricarmen Sánchez fue la elegida para ser madrina del Niño Dios del Museo Amparo y lo tendrá bajo su resguardo todo el año hasta la próxima posada navideña, en la que lo arrullará para dejarlo en el nacimiento.
Durante la convivencia se ofreció un taller de piñatas que disfrutaron tanto chicos como grandes.