¿Talavera o loza poblana?

Redacción

  · domingo 26 de junio de 2016

Por Jorge Eduardo Zamora Martínez

Hola queridos lectores, gracias por recibirme nuevamente en sushogares en este lluvioso domingo de Junio, en esta ocasión les voya narrar la historia de uno de los objetos mas simbólicos de lafamilia poblana, la talavera, pero para esta narración, dejéestacionado en el hangar mi Focker  triple ala y le pedí a MartyMackfly prestado para esta ocasión su fabuloso De Lorean paraviajar a través del tiempo, espero que esta historia sea de suagrado:

Iniciamos nuestro viaje a través del tiempo, y regresamos a laPuebla del año de 1550, con sus calles empedradas, sus carretas decarga tiradas por caballos, se empieza la traza de la nuevaAngelópolis, están en proceso de construcción muchos de sustemplos, casas coloniales se comienzan a levantar, las familiasmás potentadas, con  casas de dos pisos, con sus fachadasbarrocas y hermosa balconería herrada, las familias más modestas,casas de un solo piso, todas con sus enormes ventanales enrejados,patios coloniales, coronados por hermosas fuentes de piedra decantera, con sus características grapas de hierro emplomadas, ydetrás de ésta, la monumental escalera, cerrando estos patioscoloniales, amplios corredores con sus enormes macetones comofieles guardianes,  y en los comedores de las  nuevas familiaspoblanas, presumiendo hermosas vajillas de porcelana china,francesa e italiana , traídas ex profeso del viejo mundo, pero, derepente,  un accidente en la cocina provocó la pérdida de variasde estas piezas, quedando arruinado el juego de vajilla, ahora areponerlo, ¿cómo mostrar a las visitas una vajilla incompleta?,ni pensarlo,  pero estos accidentes surgían en todas las cocinaspoblanas, ¿en cuánto le saldría a las familias reponer laspiezas faltantes?, ¿y además, en cuanto tiempo ya las tendríanaquí, en casa?; para ese problema, las familias criollo poblanasle buscaron una rápida solución, fabricarla aquí en Puebla,¿pero quién la fabricaría?, respuesta, se  invitó a variosartesanos de la localidad  de Talavera de la Reina, provincia deToledo, a mudarse a la nueva ciudad en el nuevo continente, paraque establecieran sus hogares y trabajaran en lo que es suespecialidad, las vajillas de loza.

Ya establecidos los nuevos artesanos en la Angelópolis,conocieron las vasijas elaboradas por los locales para el uso delos emperadores y monarcas de los pueblos de Mesoamérica, alquedar sorprendidos, decidieron copiar sus gráficos e implementarnuevos diseños, logrando un gran semillero de diseños  y usospara esta nueva técnica de fabricación de loza, no solo paravajillas, sino también  para fachadas, fuentes ornamentales,diseño de interiores, placas conmemorativas, nomenclatura, macetasy floreros,  y otros muchos usos.

Ahora nos trasladamos en este fabuloso viaje a través eltiempo, al año de 1620, ya para estas fechas, las primerasfamilias de artesanos españoles, luego criollos, y ahoramestizos  ya habían establecido una rúbrica en sus trabajos deloza poblana, ya sus hijos habían heredado las técnicas defabricación y diseño, y ahora estaban enseñándolo a losnietos.

Y fue tanto el auge de esta nueva labor que comenzaron a llegara Puebla más familias españolas de las provincias de Sevilla, eincluso algunas de Génova Italia, estas últimas, comenzaron acombinar sus conocimientos de vidriería con la nueva loza poblana,elaborada con barro cocido, recubierto de porcelana y bellamentedecorado con brillantes colores, obtenidos de la mescla y cocciónde distintas sustancias ferrosas,  como el cobalto, estaño,calcio, hierro y otras,  la cual ya seria bautizada con el nombrede Talavera Poblana.

Hacemos un salto en el tiempo este viaje , y ahora estamos en1653, y nos encontramos con la novedad de que ya hay en Puebla ,mas de 50 fabricantes de talavera , formando un amplio catalogo detécnicas y diseños, los cuales ya se torna imposible establecerun orden en la  fabricación de este, lo que obligó al virrey de España a establecer una normativa , logrando en 1662, unaprimera ordenanza para la fabricación y diseño de talavera,uniformando todos los métodos de fabricación para esta, ordenanzaque funcionó hasta el año de 1682, cuando se actualiza exigiendomayor calidad en la fabricación ,y estableciendo las primerasnormas para capacitar a sus trabajadores,  logrando tres tipos decalidad de talavera, fina, común y amarilla, siendo la primera lade más alto precio por su calidad, al grado de que los recipienteshospitalarios se comenzaron a fabricar con este tipo de talavera,por el alto grado de higiene que presentaban.

Llegamos al año de 1750, esta es la época de oro de latalavera poblana, es la fecha de su internacionalización, así es,comienza la exportación de talavera poblana a centro ySudamérica, siendo un durísimo rival para las exportaciones delosas italianas, francesas y chinas hacia estos lugares, incluidaslas propias importaciones nacionales.

Al surgir cientos de conflictos entre países europeos, sesuspende la exportación de vajillas y esto causa una gran demandaen países como Panamá, Puerto Rico, Colombia, Venezuela, Cuba,Brasil, e incluso se tiene datos en algunas crónicas  que sellegó a exportar a un nuevo grupo de 13 colonias inglesas que enel año de 1776 se establecieron muy al norte del continente, comoMassachusetts, Nueva York, Pensilvania y otras.

Terminamos este viaje en el tiempo y regresamos a nuestrosdías, actualmente la talavera poblana es ya un referentehistórico y tradicional que no puede faltar en cada hogar poblano,desde una vajilla, hasta macetones, floreros, nomenclaturafamiliar, y en nuestras calles, fachadas, placas conmemorativas,fuentes ornamentales en nuestros parques públicos, hasta fachadascompletas de iglesias, edificios públicos y particulares,nomenclatura urbana y un sinfín de sitios y objetos, y ni se digaen las casas de la clásica confitería poblana, no hay presentemás agradable y elegante que el obsequiar un hermoso platónrepleto de nuestra deliciosa dulcería local, de la cual ya leshablare en otra futura entrega.

Agradezco por este medio a mi amigo Ricardo Ramos Torres de casade talavera La Colonial, por las amplias facilidades prestadas parala realización de esta crónica.

Espero que esta narración les haya sido de su agrado, en estaocasión dejo pendiente la respuesta de la pregunta que dejeplanteada la semana pasada, la cual fue: a principio de los años70s, muchos fuimos testigos de una figura muy marcada que siemprecirculaba por las calles alrededor del zócalo, una pequeñaviejecita que tenia totalmente desviada la columna, esta viejecitamarcó toda una época por su lento y raro andar,  ya  estoyinvestigando más profundamente la respuesta que les voy apublicar, se van a sorprender.

Para la próxima semana les dejo esta pregunta, cada año desde1967 y hasta 1972 se presentaba en el estadio Zaragoza unespectáculo automotriz, lleno de adrenalina, tan fabuloso, que más de uno mojó su ropa interior de la emoción de ver a un grupode audaces la manera como manejaban  sus autos de una forma tansuicida y temeraria, ¿cómo se llamaba este espectáculo?

Recuerda, si deseas una agradable platica de historia de Puebla,puedes contactarme a mi correo profelalo2002@hotmail.com,también en mi pagina de facebook  Eduardo Zamora Martínez víainbox,  o a mi cuenta de Twitter @elbaronrojo62, hasta lapróxima.