Atlixco lo tiene todo para cautivar a cualquiera, la naturaleza no solo le concedió el mejor clima del mundo, también laderas regidas de manantiales que han favorecido el cultivo de flores y la creación de balnearios.
Este pueblo mágico se ha vuelto el plan perfecto para escaparse a conocer su historia, sus viveros y disfrutar su gastronomía. Se encuentra a solo 30 kilómetros de la capital poblana que se recorren en 20 minutos.
Disfruta un paseo lleno de vida en la zona norponiente de la ciudad que alberga decenas de viveros en los que encontraras naturaleza viva en todas sus formas y colores: cientos de especies de flores y plantas. Son conocidos como los viveros de Cabrera y se ubican en la calle 20 poniente a la altura del Jagüey.
Darte una vuelta por el zócalo será una gran experiencia en la que podrás observar como esta ciudad ha armonizado su desarrollo urbano con su legado arquitectónico colonial que data del año 1579, año de su fundación.
Después de tanto caminar, refréscate con un raspado o sorbete típicos del pueblo; seguramente, se te abrirá el apetito, así que solo tienes que entrar en alguno de los restaurantes del centro para degustar una rica cecina atlixquense con su guacamole, antojitos y hasta mariscos.
- Sugerimos leer: Invaden los gigantes a Atlixco, así es el Festival de Paja
En Atlixco también puedes divertirte bajo el sol y el agua de manantial, en sus balnearios y parques acuáticos, ahí podrás disfrutar el aire puro y convivir con la naturaleza; algunos tienen zona de acampar y hasta ofrecen hospedaje.
Ahora que si lo tuyo es la aventura, visita el parque Xtremo en el Aeródromo de Atlixco, lo pasarás genial en la tirolesa, el gotcha, los karts, en los lagos con rampas y hasta tendrás oportunidad de lanzarte en paracaídas.
Lánzate a conocer Atlixco, ¡el lugar de la eterna primavera!