¿Sabías que el cenote más profundo del mundo se encuentra en México? Y no, no está ni en Yucatán ni en Quintana Roo, se encuentra en el estado de Tamaulipas y es conocido como El Zacatón, esto a pesar de que los anteriores destinos turísticos siempre se vienen a la mente cuando se habla de cenotes.
Situado en el Rancho Bioventura, en el municipio de Aldama (a menos de dos horas de Tampico), a una hora y cuarenta minutos del Aeropuerto Internacional de Tampico, se encuentra esta maravillosa creación de la naturaleza, un gran pozo de agua de gran profundidad, que se alimentan por la filtración de la lluvia y que ha sido utilizado por la mismísima NASA para expediciones espaciales.
Y es que, si bien Tamaulipas no es precisamente famoso por poseer cenotes, lo cierto es que, si tiene el considerado más grande del mundo, título que se la ha dado por tener cerca de 319 metros de profundidad y un diámetro de 99 metros, que da la ilusión de ver un gigantesco cráter con abundante vegetación.
Enclavado en el rancho tamaulipeco, el cual también resguarda cuatro cenotes más y unas grutas, este bello lugar forma parte de un sistema de simas y cavernas con aguas que contienen importantes concentraciones de azufre.
Es importante mencionar que el nombre de El Zacatón proviene de las islas flotantes de césped que se mueven de un lado al otro cuando el viento sopla, un bello paisaje que en definitiva invita a ser capturado en una fotografía para el recuerdo.
¿SE PUEDE NADAR EN ESTE CENOTE?
A pesar de que resulte difícil de aceptar que, aunque el color azul metálico de sus aguas te invita a sumergirte, lo cierto es que lugareños no recomiendan hacerlo, esto debido a que sus aguas contienen un alto grado de metales y azufre que no es tolerable para los seres humanos, además de que la gran caída podría provocar graves fracturas.
No obstante, y pese a las advertencias, algunos youtubers y buzos profesionales se han lanzado y por fortuna han salido victoriosos.
BUCEO EN EL CENOTE MÁS PROFUNDO DEL MUNDO
A partir de que este lugar comenzó a hacerse famoso en todo el mundo, llamó la atención de los buzos más aventureros y arriesgados, esto debido a que sus dimensiones resultaron bastante tentadoras para los expertos aficionados a sumergirse en las aguas profundas de cualquier parte del mundo.
En su intento de llegar al fondo, en 1993 la doctora Ann Kristovich logró alcanzar los 168 metros de profundidad, un récord mundial en aquel entonces; un año más tarde, los buzos Jim Bowden y Sheck Exley del equipo de Kristovich, establecieran un nuevo récord mundial, logrando los 281 metros de profundidad, aunque un lamentable hecho de este suceso fue que el segundo murió en el intento y solo logró descender a los 276 metros.
Aquí es importante destacar que El Zacatón no es un lugar apto para bucear, debido a que sus aguas no son cien por ciento cristalinas y al llegar a cierta distancia, la obscuridad será absoluta.
¿EXPLORADO POR LA NASA?
En 2007, la NASA envió un robot a explorar El Zacatón, el cual tenía varias misiones: la primera era conocer la profundidad exacta del cenote, que hasta entonces seguía siendo desconocida y la segunda era buscar muestras de vida microscópica en el lecho.
Finalmente, el robot creado por la Carnegie Mellon University, se utilizó como prueba para desarrollar un vehículo que pudiera algún día explorar dentro de Europa, una de las “lunas” de Júpiter.