/ viernes 18 de marzo de 2022

Puebla tiene túneles secretos bajo la ciudad, así puedes llegar a ellos

En 2014 fue descubierta la primera etapa de este recorrido, que comprendería un total de 10 kilómetros bajo tierra

Puebla es una ciudad llena de historia y uno de los espacios que no puedes dejar de visitar, seas local o turista, son los túneles que resguardan la historia subterránea de la ciudad, la cual cuenta con momentos que fueron clave para el futuro de nuestro país, tal es el caso de la Batalla de Puebla o la Revolución Mexicana, por lo que aquí te diremos de cuales se tratan.

Y es que no se trata de simples edificaciones bajo el suelo, sino que prácticamente todo Centro Histórico de Puebla cuenta con una compleja red de túneles que se calcula tienen una extensión de 10 kilómetros, mismos que hasta ahora sólo han sido explorados en un 10%.

Fue desde la administración del ex gobernador Rafael Moreno Valle que se arrancó con este proyecto, en aquel entonces con un breve tramo ubicado en debajo de la esquina del Boulevard 5 de Mayo y la calle 2 Oriente, atracción que fue denominada como “Los Secretos de Puebla” y que comenzaba en el llamado Puente de Bubas.

¿QUÉ SE SABE DEL PUENTE DE BUBAS?

El llamado Puente de Bubas o Puente de Amalucan habría sido edificado en el siglo XVII, en inmediaciones del Barrio de La Luz, y de acuerdo con las autoridades era utilizado para cruzar el río San Francisco, en aquel entonces también conocido como río Almoloyan, además de que conectaba de forma directa a la ciudad con el Hospital de las Bubas.

El nombre que recibió este nosocomio y posteriormente el puente, proviene de los síntomas del llamado humor gálico o mal francés, que en la actualidad es identificado como sífilis; fue tras la construcción del Boulevard Héroes del 5 de Mayo y el entubamiento del río San Francisco en 1946, que el puente quedó completamente oculto, como permaneció hasta 1999.

Fue una obra pública lo que dejó la edificación al descubierto, hasta que finalmente en diciembre del 2014 abrió sus puertas al público para mostrar a propios y extraños sólo una tercera parte del puente original que se puede visitar de martes a domingo de 10 de la mañana a 4 de la tarde, con un costo general de 27 pesos, con credencial de 11 y para menores de 12 años 6.

A lo largo del recorrido los visitantes pueden disfrutar de iluminación que le da un ambiente especial, recursos audiovisuales y exposición de objetos encontrados como herraduras, palas, bayonetas, pinzas, botones, cerámica y juguetes.

¿QUÉ ES EL PASAJE HISTÓRICO 5 DE MAYO?

Tras continuar los trabajos, tiempo después fueron abiertos al público dos puentes más, los cuales fueron denominados como “Pasaje Histórico 5 de Mayo” y que habrían sido construidos entre los siglos XVIII y XIX.

Esta segunda etapa comprende desde el Puente de Ovando, Casa de García de Aguilar, Humilladero, Nicho de los Trabajadores, Claustro del Convento Franciscano, Hornos de Pan, Lavaderos de Almoloya, Plaza de Fray Junípero de Serra y el Pasaje Histórico 5 de Mayo.

Su descubrimiento se dio durante las obras de construcción del viaducto Zaragoza entre 2011 y 2012, cuando fue localizado un muro de contención del antiguo río San Francisco, el cual también contaba con un arco tapiado que terminó por ser una galería subterránea con dirección al barrio de Xanenetla.

En este tramo los visitantes pueden disfrutar de “Las dos Pueblas”, un mural del artista Fuentes de María, que plasma la diferencia social en Puebla entre los españoles e indígenas, además de que el recorrido lleva a las inmediaciones del Fuerte de Loreto y Guadalupe, una sala contemplativa en la cual se observa los cuadros artísticos y un mapa de la antigua distribución del río San Francisco y el Puente de Ovando.

En cuanto a sus características, tiene una longitud de un kilómetro y cinco metros de profundidad; se piensa que pudo haber sido utilizado como estrategia de combate para la defensa de la ciudad de Puebla en la Batalla del 5 de Mayo en 1862 contra el ejército francés, además de que también comunicaban con las iglesias para transportar sus riquezas e incluso por ahí transitaban monjas.

Algunas leyendas incluso afirman que Porfirio Díaz cruzó por las bóvedas de la ciudad, al igual que por Benito Juárez, pero sus trabajos continúan desde enero del 2017 que fueron abiertos al público.

Finalmente, este espacio se encuentra abierto de martes a domingo en un horario de 10 de la mañana a 4 de la tarde y el acceso se encuentra sobre el Boulevard 5 de Mayo Oriente No 208, en el Barrio de Xanenetla y con el boleto al puente de Bubas, el acceso a esa zona es gratis.

Puebla es una ciudad llena de historia y uno de los espacios que no puedes dejar de visitar, seas local o turista, son los túneles que resguardan la historia subterránea de la ciudad, la cual cuenta con momentos que fueron clave para el futuro de nuestro país, tal es el caso de la Batalla de Puebla o la Revolución Mexicana, por lo que aquí te diremos de cuales se tratan.

Y es que no se trata de simples edificaciones bajo el suelo, sino que prácticamente todo Centro Histórico de Puebla cuenta con una compleja red de túneles que se calcula tienen una extensión de 10 kilómetros, mismos que hasta ahora sólo han sido explorados en un 10%.

Fue desde la administración del ex gobernador Rafael Moreno Valle que se arrancó con este proyecto, en aquel entonces con un breve tramo ubicado en debajo de la esquina del Boulevard 5 de Mayo y la calle 2 Oriente, atracción que fue denominada como “Los Secretos de Puebla” y que comenzaba en el llamado Puente de Bubas.

¿QUÉ SE SABE DEL PUENTE DE BUBAS?

El llamado Puente de Bubas o Puente de Amalucan habría sido edificado en el siglo XVII, en inmediaciones del Barrio de La Luz, y de acuerdo con las autoridades era utilizado para cruzar el río San Francisco, en aquel entonces también conocido como río Almoloyan, además de que conectaba de forma directa a la ciudad con el Hospital de las Bubas.

El nombre que recibió este nosocomio y posteriormente el puente, proviene de los síntomas del llamado humor gálico o mal francés, que en la actualidad es identificado como sífilis; fue tras la construcción del Boulevard Héroes del 5 de Mayo y el entubamiento del río San Francisco en 1946, que el puente quedó completamente oculto, como permaneció hasta 1999.

Fue una obra pública lo que dejó la edificación al descubierto, hasta que finalmente en diciembre del 2014 abrió sus puertas al público para mostrar a propios y extraños sólo una tercera parte del puente original que se puede visitar de martes a domingo de 10 de la mañana a 4 de la tarde, con un costo general de 27 pesos, con credencial de 11 y para menores de 12 años 6.

A lo largo del recorrido los visitantes pueden disfrutar de iluminación que le da un ambiente especial, recursos audiovisuales y exposición de objetos encontrados como herraduras, palas, bayonetas, pinzas, botones, cerámica y juguetes.

¿QUÉ ES EL PASAJE HISTÓRICO 5 DE MAYO?

Tras continuar los trabajos, tiempo después fueron abiertos al público dos puentes más, los cuales fueron denominados como “Pasaje Histórico 5 de Mayo” y que habrían sido construidos entre los siglos XVIII y XIX.

Esta segunda etapa comprende desde el Puente de Ovando, Casa de García de Aguilar, Humilladero, Nicho de los Trabajadores, Claustro del Convento Franciscano, Hornos de Pan, Lavaderos de Almoloya, Plaza de Fray Junípero de Serra y el Pasaje Histórico 5 de Mayo.

Su descubrimiento se dio durante las obras de construcción del viaducto Zaragoza entre 2011 y 2012, cuando fue localizado un muro de contención del antiguo río San Francisco, el cual también contaba con un arco tapiado que terminó por ser una galería subterránea con dirección al barrio de Xanenetla.

En este tramo los visitantes pueden disfrutar de “Las dos Pueblas”, un mural del artista Fuentes de María, que plasma la diferencia social en Puebla entre los españoles e indígenas, además de que el recorrido lleva a las inmediaciones del Fuerte de Loreto y Guadalupe, una sala contemplativa en la cual se observa los cuadros artísticos y un mapa de la antigua distribución del río San Francisco y el Puente de Ovando.

En cuanto a sus características, tiene una longitud de un kilómetro y cinco metros de profundidad; se piensa que pudo haber sido utilizado como estrategia de combate para la defensa de la ciudad de Puebla en la Batalla del 5 de Mayo en 1862 contra el ejército francés, además de que también comunicaban con las iglesias para transportar sus riquezas e incluso por ahí transitaban monjas.

Algunas leyendas incluso afirman que Porfirio Díaz cruzó por las bóvedas de la ciudad, al igual que por Benito Juárez, pero sus trabajos continúan desde enero del 2017 que fueron abiertos al público.

Finalmente, este espacio se encuentra abierto de martes a domingo en un horario de 10 de la mañana a 4 de la tarde y el acceso se encuentra sobre el Boulevard 5 de Mayo Oriente No 208, en el Barrio de Xanenetla y con el boleto al puente de Bubas, el acceso a esa zona es gratis.

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