Hola queridos lectores, gracias nuevamente, ya estoy aquí conotro tema para platicarles, en este recién iniciado mes de marzo,que ya nos anuncia su llegada con una gran ola de calor que nosobliga a guardar chamarras, cobertores y frazadas, para cambiarlaspor sandalias, pantalones cortos y remeras frescas.

En esta ocasión les voy a narrar una brevísima historia de unode los barrios más grandes e históricos de nuestra ciudad, elhermoso barrio de Santiago.

Este bello barrio, que por cierto es uno de los más grandes dela ciudad, está localizado al sur poniente del centro históricode la ciudad. Lo demarcan al norte, la avenida Juárez, al sur laavenida 25 Poniente, al poniente la calle 25 Sur, con su únicoinmueble en su lado poniente, el panteón de La Piedad, y aloriente la calle 11 Sur. Así es, son más de 50 manzanas las quelo integran.

EL CORAZÓN DEL BARRIO

Indudablemente el corazón de este enorme barrio, es el jardíncentral y su iglesia parroquial, adornado al centro con una enormearcada, que en su tiempo de fundación fue la entrada al atrio y ala superficie que fue el panteón de la iglesia. El templo fueconstruido, según crónicas, en el año de 1550, y fue financiadopor donativos de los pobladores, la mayoría, trabajadorescholultecas que encontraron en la fundación de la ciudad unaexcelente fuente de ingresos, no solo para ellos sino hasta susbisnietos, ya que la iglesia fue terminada en 1640, incluida sutorre sur; su fachada de cantera fue renovada en el siglo XX, aligual que la torre norte, en que le fue agregada, obra del escultorpoblano Jesús Corro Soriano, quien también en esas mismas fechaselaboró las torres del templo de san Cristóbal, en la 4 Norte y 6Oriente.

EL TEMPLO DEL APÓSTOL El interior del temploestá bellamente adornado totalmente en lámina de oro, su altarmayor tiene como característica la forma de una enorme concha,teniendo en su centro el nicho que alberga la imagen de la virgendel Sagrado Corazón, a quien está dedicado el templo.

Los altares laterales, bellamente decorados con grandes arcadasy la imágenes custodiadas por columnas salomónicas, totalmenterecubiertas en lámina de oro. Destaca en su costado sur un belloambón o púlpito elaborado en ébano negro, artísticamentetallado con imágenes religiosas, hoy en día luce como pieza deadorno, ya que el púlpito se dejó de utilizar con las reformasdel concilio vaticano II en 1962.

LOS VECINOS QUE SE FUERON

El barrio de Santiago tuvo su época de oro en el siglo XX,cuando fue el asentamiento de innumerables familias de clase alta,quienes llenaron el barrio de enormes y bellas mansiones de todoslos estilos y diseños, desde colonial californiano, hasta artdecó y modernista, pero lo que marcó su paso por la historia dela ciudad fueron sus grandes inmuebles, desaparecidos por el tiempoy la modernidad:

La plaza de toros, inmueble de mampostería localizado en lamanzana de la 19 Sur, entre la 9 y la 11 Poniente, construida en1934, que dejó de funcionar como tal en el año de 1974, alaplicarse las disposiciones del organismo regidor de la tauromaquiaen el país, que dispuso que no debería de haber ninguna plaza detoros a menos de 150 kilómetros de la plaza de toros México, loque marcó su fin, fue demolida y en su lugar construido uninmueble que a lo largo de la historia poblana lo han ocupadodistintos centros comerciales, hasta nuestros días.

El velódromo de la 11 Sur, a principios del siglo XX elgobernador Mucio Práxedes Martínez ordena la construcción de unvelódromo para la práctica profesional del ciclismo, localizadoen las manzanas que forman la calles 11 Sur, 15 Poniente, 13 Sur y11 Poniente, esto es, al lado sur del paseo Bravo, desmantelado enlos años 20, para trazar las calles actuales y su actuallotificacion.

El club deportivo Alfa 1, este inmueble, localizado en la 21 Surentre la 9 y 11 Poniente, tuvo un inicio en su construcciónbastante raro. Cuenta la historia que su dueño, William Jenkins,aficionado al tenis, compró los terrenos antes de la segundaguerra, en aquellas fechas era un frondoso bosque, y al centro delmismo construyó 6 canchas de tenis al aire libre, y en 1951construye una pequeña casa club al oriente de estas, y fue tantala asistencia de aficionados, que en 1957 construye el centrodeportivo alrededor de esas 6 canchas de tenis, dando origen alclub deportivo, cerrado y vendido en el 2009 a conocida universidaddel rumbo.

Así es queridos lectores, espero que esta breve historia hayasido de su agrado. Ahora doy paso a dar contestación a la preguntaque dejé planteada la semana pasada, la cual fue: ¿Qué personajede la historia poblana es el que ostenta su nombre el mayor númerode instituciones poblanas?

Respuesta: 36 escuelas portan el nombre de Manuel Paz y Puente,20 en la ciudad y 16 en el interior del estado. Manuel Paz yPuente, existen muy pocos datos acerca de este personaje, lo másrelevante es que estuvo en el interior de la casa de AquilesSerdán aquel 18 de noviembre de 1910. Todas las crónicas de laépoca lo mencionan, pero no se sabe a ciencia cierta si fuepartícipe o testigo accidental del evento, incluso, no existe datoacerca de sus actividades antes y después de la refriega, pero locurioso es que su nombre es el más repetido en nombres de escuelase institutos.

Para la próxima semana les dejo la siguiente pregunta: ¿Quéescuela privada fue vecina durante más de 30 años del clubdeportivo Alfa 1 en la 21 Sur.

Recuerda querido lector, que ya puedes escucharme a través dela radio, en la transmisión de mi programa en vivo a través de laHR, del grupo Cinco Radio, “CALLES Y DETALLES con el BarónRojo” en la banda de AM, en la frecuencia 1090, y también através de tu dispositivo, visualiza la página de Cinco Radio,accesa al botón radio en vivo y estaciones, haz clic en el botónla HR1090, y haz clic en el botón rojo a la izquierda escuchar envivo. Recuerda, todos los domingos a las 12 del día, espero tusllamadas y comentarios al 2-73-33-01 y 2-73-33-02.

Si deseas una agradable plática de historia de Puebla, puedescontactarme a mi correo profelalo2002@hotmail.com, o a mi cuenta deTwitter @elbaronrojo62, o a mi página de Facebook, vía inboxEduardo Zamora Martínez, mil gracias y hasta la próxima.