Uno de los eventos que no ocurre con frecuencia y que acapara las miradas del mundo es el cónclave de la Iglesia Católica, pues es el procedimiento mediante el cual es elegido al nuevo Sumo Pontífice de este culto religioso cuando su antecesor fallece, aunque existen contados casos en los que se ha dado por una renuncia como en el caso de la elección del Papa Francisco en el 2013.
Pero estos protocolos no suelen arrojar resultados en una primera votación, por lo que incluso es conocida la práctica de quemar los botos en una chimenea que sirve de informe para quienes se encuentran a la expectativa del resultado, arrojando un humo negro cuando no existe consenso y blanco cuando se llegó a un acuerdo en la elección de una persona para este cargo.
¿Cuál ha sido el cónclave más largo de la historia?
Sin embargo, existen algunas de estas reuniones que han destacado por ubicarse dentro de las de mayor duración, aunque hasta ahora sólo uno es calificado como el más largo de la historia, se trata del ocurrido el 29 de noviembre de 1268 en que fue elegido el Papa Gregorio X, pues mientras estos llegar a durar días o si acaso semanas, la votación tardó 34 meses.
El hecho de que este procedimiento tuviera una duración de aproximadamente tres años, incluso esta reunión recibió el nombre de cónclave a partir de este evento, pues proviene de la etimología de dos palabras en latín “cum” que significa “con” y “clavis” que hace referencia a “llave”, misma que comenzó a ser utilizada desde el siglo XIII por determinación del gobernador de Viterbo.
Y el nombre proviene luego de después de casi tres años de Sede Vacante, como se le conoce a la ausencia de un Sumo Pontífice, el mandatario determinara encerrar con llave a los cardenales que tenían por encargo elegir al nuevo Papa desde el verano europeo de 1270, al grado que este hecho se encuentra registrado dentro de la llamada Enciclopedia Católica.
Este mismo documento señala que la indecisión se debía a que los sacerdotes se encontraban divididos en dos campos por un Papa francés o por un Pontífice italiano, por lo que ninguno lograba conseguir los dos tercios de la mayoría de los votos, pero tampoco quería ceder para que el otro pudiera ser elegido, hasta que se llegó a un compromiso ante los esfuerzos de los reyes de Sicilia y Francia al grado que el sacro Colegio conformado por 15 cardenales, designó a seis para emitir un voto final.
¿Cómo funciona el cónclave?
El cónclave es una asamblea de cardenales que se reúnen para la elección del Romano Pontífice, teniendo como la fecha pactada para iniciar el encuentro 15 días después de la muerte o renuncia del Santo Padre, sin embargo, el Colegio de Cardenales pueden establecer otra fecha siembre que esta no se retrase por más de 20 días, teniendo como sede siempre la Capilla Sixtina en el Vaticano.
Finalmente, para que el resultado de la elección del nuevo sucesor de Pedro sea válido debe reunir las dos terceras partes de los votos de los cardenales que se encuentran a puerta cerrada y es después de cada votación que las papeletas son quemadas en conjunto con un polvo que le puede dar un color negro al humo cuando aún no hay un nuevo Papa y blanco cuando haya podido llegar a un consenso.