La Fonda Margarita es un concepto de negocio de comida tradicional mexicana que nació en la mixteca poblana gracias a la iniciativa y visión empresarial de Margarita Morán Véliz, originaria del municipio de Tecomatlán. Hoy en día cuenta con 32 sucursales de este giro en el país, incluyendo en la capital del estado de Puebla, así como hoteles y cafeterías.
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La creadora de este concepto fue una de las fundadoras del antorchismo nacional y quien le puso el nombre de Antorcha Campesina, por eso a ese municipio se le conoce como "La cuna de Antorcha".
Margarita tenía el deseo de que su comunidad creciera económicamente, y fue así como en 1988 abrió su primer establecimiento, al que llamó La Unión, con el objetivo de unir a su localidad a través de la comida. Este negocio se abrió en la carretera Palomas – Tulcingo del Valle, kilómetro 20, justo frente a la única gasolinera que existe en Tecomatlán.
“Ella estaba muy preocupada por el crecimiento y desarrollo de su comunidad, ella quería que existiera un desarrollo económico, pero a la vez por sus valores y sus orígenes, era una señora de casa y tenía pasión por la gastronomía (…) se juntaron los factores y así abrió su primera fondita”, expresa Fernanda Burián, gerente general, desde el inmueble más nuevo de la cadena, un hotel ubicado en la 5 Poniente del centro histórico de Puebla.
La acogida que tuvo ese primer local (La Unión) fue muy positiva. Los mismos habitantes locales le sugirieron a Margarita que incluyera platillos tradicionales de la región, como el adobo de cerdo, el mole poblano, el pipián verde con tamales de frijol y el huaxmole, para darse a conocer entre los turistas que visitaran el lugar.
La idea de Margarita era que cuando alguien quisiera conocer Puebla o la comida de la mixteca, la encontrara dentro de su fonda, para enseñar lo que en la gastronomía original sin importar la época del año afirma Fernanda.
De La Unión a la Margarita
El éxito fue tal que, en pocos años, Margarita decidió expandir el concepto abriendo más sucursales en municipios cercanos como Acatlán de Osorio, Tehuitzingo e Izúcar de Matamoros, y fue en esos momentos que el nombre del negocio empezó a cambiar.
Justo cuando abre otras sucursales la gente empezó a ubicar a La Unión no como su nombre, sino que las mismas personas decían que querían ir a la fonda de doña Margarita y se fue quedando el nombre, hasta como la fecha se le conoce, pero ahora de manera oficial confiesa la gerente.
A la capital y estados
Pero la expansión de la Fonda Margarita no se detuvo ahí. Posteriormente, Margarita y familiares decidieron abrir sucursales en la capital del estado de Puebla, estableciendo la primera de ellas hace aproximadamente 20 años en el centro histórico, en la 2 Poniente número 506.
Hoy en día cuentan con cuatro locales en la capital poblana. La expansión de la cadena no se detuvo allí, y actualmente cuentan con 32 sucursales distribuidas en los estados de Puebla, Estado de México, Oaxaca, San Luis Potosí y Morelos.
“Todo fue a consecuencia del crecimiento, al ver el éxito de los municipios la idea era llegar a la capital y dar a conocer tus platillos, que no solo se conocieran en tu municipio, entonces poco a poco esto fue creciendo hasta que se empezó a expandir todo a otras partes del país (…) ya no solo Margarita, sino que con el tiempo esto se hizo una sociedad”, explica Burián.
Platillos poblanos, el éxito
Uno de los factores clave del éxito de la Fonda Margarita ha sido su capacidad para popularizar la comida tradicional poblana entre sus comensales. El adobo de cerdo, el mole poblano, el huaxmole y el pipián verde con tamales de frijol se llevaron a cada una de las 32 sucursales, dejándolos como base en la carta, sin dejar de agregar otros más típicos de los lugares a donde llegaron.
La gente poblana tiene bien identificada su gastronomía, entonces saben cuando un producto es original, entonces los poblanos reciben con mucha nostalgia los sabores, son platillos que se disfrutan; los foráneos en otros estados agradecen y los habitantes de cada lugar lo disfrutan destaca, por su parte, Joselino Ramírez, gerente de una de las sucursales.
Hoteles y cafetería
Además del crecimiento de la red de fondas, la empresa también ha diversificado sus servicios, agregando hotel y cafetería a algunos de sus establecimientos, con el objetivo de ofrecer a sus clientes una experiencia integral donde puedan encontrar alojamiento, alimentación y esparcimiento en un solo lugar.
El más reciente fue abierto hace un año en la 5 Poniente 914 de Puebla capital, dentro de un inmueble que fue construido a principios del siglo XX. También cuenta con una fonda y una cafetería.
En total tienen cinco hoteles, además del antes comentado: Tecomatlán, Acatlán de Osorio, San Luis Potosí y Toluca.
Se les quiso dar a las personas todos los servicios en un solo lugar, hasta la fecha todo ha sido un éxito señala Joselino.
Fonda Margarita es un ejemplo destacado de cómo una iniciativa local puede crecer y expandirse a nivel regional, estatal y hasta nacional, adaptando y popularizando la comida tradicional de una región.
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“El concepto es una consecuencia de varios hechos que sucedieron gracias a una persona (…) se juntaron los tres factores. Una luchadora social, preocupada por la economía y con pasión por la comida (…) hoy día todos nosotros tenemos claro cuál es el objetivo principal de estos negocios”, finaliza Fernanda Burián.