Con tan solo 12 años de edad, Federico Hyadi Santillana Romero ha logrado leer poco más de 350 libros, una tarea nada fácil para un pequeño de su edad, sobre todo por la era en la que nos encontramos inmersos donde la tecnología está a la orden día para el entretenimiento.
A través de una entrevista con El Sol de Puebla, Hyadi (cuyo nombre en otomí significa Sol en otoño) compartió que desde que era muy pequeño observaba a su familia que leía en el jardín, sin saber exactamente lo que hacían y esa curiosidad fue lo que inició en el mundo de las letras.
“Ellos venía al jardín, se sentaban en alguna mecedora y pasaban horas y horas leyendo, desde que era muy chiquito me llamaba mucho la atención que se sentarán un largo tiempo agarrando un libro y yo no sabía qué hacían, un día les pedí que me leyeran y así empecé el gusto por la lectura”, confesó.
Su pasión por la lectura comenzó desde que tenía 4 años, periodo en el que aprendió a leer por sí mismo, además de que es un hábito que le instruyeron su madre y principalmente su abuelita, heredado de su bisabuela Rogelia, quien trabajó en la biblioteca Guillermo Prieto.
“Por su trabajo (su bisabuela) le enseñó a mi abuela y a sus cuatro hermanos el valor de leer y en general a toda mi familia, nos gusta leer mucho (…) Conoció a muchas personas importantes en la biblioteca, abrió mucho su cultura y esa es la parte importante de la lectura que no solo es el entretenerse sino es la forma en la que amplias la cultura”, comentó.
Actualmente cuenta con más de 300 libros, la mayoría regalos de su familia y otros más que él ha juntado para comprárselos; el tipo de lectura que más disfruta es la que tenga que ver con la cultura del país y la de mitología, aunque expresó ha tenido etapas en donde ha gustado de lecturas de ciencia ficción, psicología y hasta filosofía, pues dijo que se le hace interesante la forma de pensar del ser humano.
El pequeño compartió que puede leer hasta cinco libros en una semana, con tan solo dedicarle una hora y media al día en su lugar favorito de la casa, una pequeña banca en el jardín, debajo de un rosal y al lado de su mascota “Drusy”, un pequeño gato que adoptó su familia a partir de la pandemia.
Otros de sus pasatiempos favoritos del pequeño, son los juegos de mesa y también los rompecabezas, pues a diferencia de otros niños, él no utiliza el internet para entretenimiento, solo para cosas indispensables como la escuela o para buscar o conceptos que no entiende de los libros, incluso afirmó que no le gusta leer libros digitales, sino más bien en físico.
Federico dijo que cuando sea grande sueña con estudiar varias carreras profesionales, entre ellas Idiomas y Astrofísica, la primera porque aseguró tener mucha facilidad para memorizar y aprender nuevos conceptos y la segunda, porque siempre le ha fascinado el concepto del espacio.
Finalmente, el menor aconsejó que la mejor forma de aprender a leer es dejar que el interés nazca solo y compartió un mensaje a las familias a acercarse e integrarse a través de este bello hobbie.
“La mejor forma de enseñar no es obligando a alguien, porque eso genera un odio irracional a la lectura por la forma en la que te enseñaron (…) Yo les diría a las familias que pasen tiempo con sus hijos, no que les lean cuentos, pero que logren, a través de los pasatiempos que tienen, enseñar lo básico y ya de ahí lo básico, ir contando, por ejemplo, yo me acerque a la lectura a través de las anécdotas, pedir que te cuenten historias que sí pasaron”, concluyó.
LA LECTURA UN REFUGIO PARA SOBRELLEVAR LA MUERTE DE SU ABUELITA
Federico, quien actualmente cursa el sexto grado de primaria, afirmó que la lectura ha representado un escape de la realidad y un refugio en los últimos meses, pues de acuerdo a su mamá, la señora Hadi, en enero del 2021 su familia se contagió de Covid-19 y por desgracia su abuelita (del pequeño) falleció, la persona que principalmente le acercó a la pasión por leer.
“Fueron días muy difíciles porque con ella compartía mucho la lectura, incluso tenían algunos autores favoritos juntos, por eso la lectura le ha ayudado mucho a superar estos tristes días”, aseveró la señora.