Fabricar mosquetes es una pasión que trae en la sangre la familia “Montes Rueda”, y que han heredado desde que nacieron. Ahora ya forman parte de la tercera generación y con ello le siguen dando vida al Carnaval de Huejotzingo que está próximo a realizarse.
Fernando Montes Rueda, quien desde niño se convirtió en artesano a través de la enseñanza que le dio su padre, el señor Miguel Montes, nos mostró cómo es el proceso y elaboración de los mosquetones.
Primero se corta la madera en una dimensión de entre 6 y 7 centímetros dependiendo la figura, para posteriormente dejarla reposar por un mes para hacerle un curado. Después se traza y se hace el dibujo por medio de unos moldes, se comienza a cortar la madera y se talla con una lija fina. Posteriormente se hace la colocación de los herrajes y se realiza una prueba haciendo algunos disparos.
En el área de pintura, una de las encargadas es Sara Montes Meneses, de 18 años de edad, hija de Don Fernando, quien se dedica a darle el acabado final a la pieza, pintándola de diferentes colores.
Ella también ayuda en el armado de los herrajes junto con su mamá, la señora Bibiana Meneses, quien está en el área de ventas.
Los precios de estos artefactos van desde los 6 mil, hasta los 8 mil pesos, dependiendo el acabado. La familia lleva a cabo una producción anual de al menos 100 mosquetes.
Uno de los mayores logros de esta familia es que han logrado expandir su taller “Carnaval Montes” a nivel nacional e intercontinental, llevando pedidos a Estados Unidos.
Por otra parte, pobladores que participaron en un concurso ganaron un lugar para ir a presentar una exposición de tallado en Nueva York, donde se exhibirán parte de los herrajes y sus pinturas, entre las que destacan figuras como las de Indio, Zapador o Turco, por mencionar algunas de las más representativas de esta fiesta de Huejotzingo.
