Esta semana, la reliquia de San Judas Tadeo estará en la ciudad de Puebla, por lo que todos los creyentes pueden acudir a la Catedral para venerarla. Durante su paso por la entidad, se han formado largas filas de espera; por esta razón, la Arquidiócesis sugirió que se puede aprovechar ese tiempo para orar.
Esta pieza representa a uno de los doce discípulos, quien dedicó toda su vida a predicar la palabra de Cristo, sin importar las dificultades que enfrentó. A pesar de los desafíos, continuó su labor en diferentes países; sin embargo, esto lo llevó a un desafortunado final.
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Actualmente, sigue siendo recordado por cientos de fieles, especialmente durante las fiestas patronales, donde los miembros de una comunidad se reúnen para venerar a esta figura, conocida como el 'Patrón de las causas perdidas y desesperadas'. A continuación, te compartimos algunas oraciones.
¿Quién fue San Judas?
Fue uno de los doce apóstoles de Jesús, a menudo identificado como el hermano de Santiago el Menor. De acuerdo con el portal del templo "The Apostle of the Impossible", predicó el Evangelio en lugares hostiles.
La tradición cuenta que llevó la palabra de Dios a Mesopotamia, Siria y Persia, enfrentando numerosos peligros, pero nunca renunció a su misión, lo que lo convirtió en un símbolo de perseverancia y fe.
Uno de los momentos más significativos de su vida fue su martirio. Según relatos, fue asesinado por sus creencias en la región de Persia, donde las autoridades locales ordenaron su ejecución. Falleció apaleado y decapitado con un hacha.
Oraciones para pedir su Intercesión
Este santo, en ocasiones confundido con Judas Iscariote, es uno de los más venerados en ciertas regiones de Europa, así como en América. Las sagradas escrituras sostienen que su devoción proviene de un capítulo expuesto por Santa Brígida en sus Revelaciones.
En este episodio, se destaca que Dios le indicó dirigirse a San Judas Tadeo para pedirle apoyo cuando lo necesitara. A partir de ese momento, se ha solicitado su intercesión en circunstancias complicadas. Estas son algunas oraciones:
Oración más conocida
"Apóstol gloriosísimo de Nuestro Señor Jesucristo, aclamado por los fieles con el dulce título de abogado de los casos desesperados, hazme sentir tu poderosa intercesión aliviando la gravísima necesidad en que me encuentro.
Por el estrecho parentesco que te hace primo hermano de Nuestro Señor Jesucristo, por la privaciones y fatigas que por El sufriste, por el heroico martirio que aceptaste gustoso por su amor, por la promesa que el divino Salvador hizo a Santa Brígida de consolar a los fieles que acudiesen a tu poderosa intercesión.
Obtenme del Dios de las misericordias y de su Madre Santísima la gracia que con ilimitada confianza te pido a Ti, Padre mío bondadosímo, seguro que me la obtendrás siempre que convenga a la gloria de Dios y bien de mi alma. Así sea".
Para encontrar un empleo
“San Judas Tadeo, intercesor de todo problema difícil consígueme un trabajo en que me realice como humano y que a mi familia no le falte lo necesario en ningún aspecto de la vida, que lo conserve a pesar de las circunstancias y problemas adversos.
Que en el progrese mejorando siempre mi calidad y gozando de salud y fuerza. Y que día a día trate de ser útil a cuantos me rodean. Asocio tu intercesión a la Sagrada Familia, de la cual eres pariente y prometo difundir tu devoción como expresión de mi gratitud a tus favores. Amen”.
Para la soledad
“¡Santo Apóstol San Judas, fiel siervo y amigo de Jesús!, la Iglesia te honra e invoca universalmente, como el patrón de los casos difíciles y desesperados. Ruega por mí, estoy solo y sin ayuda. Te imploro hagas uso del privilegio especial que se te ha concedido, de socorrer pronto y visiblemente cuando casi se ha perdido toda esperanza.
Ven en mi ayuda en esta gran necesidad, para que pueda recibir consuelo y socorro del cielo en todas mis necesidades, tribulaciones y sufrimientos, particularmente... (haga aquí su petición), y para que pueda alabar a Dios contigo y con todos los elegidos por siempre.
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Te doy las gracias glorioso San Judas, y prometo nunca olvidarme de este gran favor, honrarte siempre como mi patrono especial y poderoso y, con agradecimiento hacer todo lo que pueda para fomentar tu devoción. Amén”.
