Las celebraciones de la Semana Santa implican una serie de eventos que muestran la devoción de los fieles, como el Viernes de Dolores, un evento que ha recuperado su importancia a través de los años. Pero, ¿cuál es el origen de este acontecimiento y cómo se celebra?
La historia cuenta que el suceso comenzó con los “padres servitas” de la Orden de los Siervos de María en el siglo XIII, por la devoción a la Virgen de los Dolores y en particular en el Viernes de Dolores con la colocación del altar que iniciaba con el "Paseo de las Flores" sobre los puentes Roldán y la Viga.
Esta costumbre poco poco dejó de ser frecuente entre los feligreses, debido a que en 1969 el Papa Paulo VI suprimió el Viernes de Dolores en Cuaresma y dejó solo el festejo del 15 de septiembre. Sin embargo, en México, desde el régimen de Porfirio Díaz, la celebración de la Independencia comienza en la noche del 15 de septiembre y Nuestra Señora de los Dolores pasó a un segundo término.
El Altar
La celebración de este evento, se manifiesta con la construcción de un monumento o el "Altar de Dolores", el cual no debe llevar el tabernáculo con la vid, que es una cajita adornada con uvas rojas en su interior, que deben ser manzanas en lugar de naranjas, que las banderas son para ‘alegrar’ a la Virgen.
Esta tradición, al igual que las Ofrendas en el Día de Muertos, tiene diferentes formas de realizarse y diferentes significados para sus elementos, aunque todavía son pocas las personas que conocen la tradición del Altar de Dolores en general.