Lo que nunca había sucedido, sucedió ayer. Los dos equipos de grupo Gimsa por primera vez desde que Gerardo Benavides se hizo de las dos franquicias, amanecieron como punteros al unísono de sus respectivas divisiones en la Liga Mexicana de Verano.
Fue en la segunda campaña de este 2018 que tanto Pericos de Puebla como Acereros de Monclova aparecieron comandando las zonas Sur y Norte en el standing del circuito de verano que por vez primera dividió su año beisbolístico en dos temporadas con un rol de 57 juegos cada una.
Los Acereros (29-9), un equipo que se armó hasta los dientes y se sigue armando, todo el comando del Norte en el mismo inicio de la temporada y desde entonces no lo ha soltado, sacando en estos momentos una ventaja de seis juegos sobre los Tecolotes de los Dos Laredos, que se han convertido en la revelación de esta segunda temporada.
Los Pericos (22-16), que llegaron a estar en la séptima posición del Sur, y que han ganado 176 de los últimos 21 juegos, amanecieron en solitario en el primer lugar con un juego de ventaja sobre Yucatán y Bravos de León, merced su doble triunfo del miércoles por la tarde-noche sobre los Olmecas de Tabasco.
Con un partido más, los Pericos mantendrán este día la ventaja en la cima del sureste, ya que tanto Bravos y Leones están enfrentándose entre sí, mientras el ganador del último de la serie se acercará a medio juego, el perdedor se alejará a juego y medio de distancia.
Después del fracaso de la primera campaña, Gerardo Benavides no ha escatimado esfuerzos para reforzar a los Pericos, y en estos momentos se ha enfocado en fortalecer su cuerpo de pitcheo para cerrar con todo y a la incorporación de José Miguel Piña, Wirking Estévez y Fernando Cruz se anunció ayer el regreso del zurdo Jost Outman, que fue pieza clave el año pasado para que el equipo conquistara el gallardete del Sur y disputará por segundo año consecutivo la final del circuito.
Queda claro que el objetivo principal de Gerardo Benavides es cumplir el sueño que se trazó desde que se hizo de la franquicia de Monclova: una final soñada entre Pericos y Acereros, dar al equipo de su ciudad natal el primer título de su historia en la Liga Mexicana.
Hasta hoy, van por ese camino.