Las campeonas Rayadas de Monterrey acabaron contra las cuerdas en su feudo, apenas rescatadas por el silbatazo final de la juez central. Si el futbol fuera box, Puebla debía de volver a casa con un empate o el triunfo por puntos; sin embargo, el balompié es de goles y las mandonas del circuito rosa hicieron dos para terminar con el invicto de las Franjitas por la carretera.
Monterrey aprovechó un mal corte de la zona baja del Puebla para embocar el primero a los 15 minutos, cortesía de Annia Mejía. La zaguera, convertida en atacante, recuperó un rechace rebanado dentro del área rival y lo mandó a guardar para estrenar la pizarra.
El 1-0 resultaba justo, pues Puebla pagaba el entrar a la cancha con recelo o con demasiado respeto por el rival. La escuadra entrenada por Jorge Gómez apenas si alcanzaba a ligar tres toques y sufría para tratar de salir de su campo.
Pero tras superar los nervios comenzó a lucir sus armas y mandar avisos de su potencial. Monterrey no lo tomó tan en serio y lo pagó en el complemento.
Un servicio desde la izquierda nacido de la pierna de Alexandra Godínez encontraba en el área a Lupita Worbis, la delantera fiel a su usanza –el primer toque- giró la cabeza y mandó a guardar el esférico para el empate.
Al final, la silbante no le concedió el tanto a Lupita, pues apreció un pequeño desvío de la defensora Rebeca Bernal como para considerar en la acción autogol. Minucias más, minucias menos… la anotación valía lo mismo y en ese momento le daba un punto de oro a las Franjitas.
Pero las poblanas se quedaban en el festejo y un minuto después perdían la chance de la remontada, gracias a la viveza de Ariana Catrina Calderón para hacerse de otro rechace dentro del área blanquiazul y rematarlo de primera intención.
Después, el juego se hizo de ataque por ataque, aunque Puebla presumió las más claras. Pero en todas lanzó salva y Monterrey, aunque terminó contra las cuerdas, resistió el asedio.
Se acabó el invicto lejos del Cuauhtémoc. Ahora todo se reduce a ganar en casa la próxima semana, donde las Franjitas no levantan los brazos desde septiembre del año pasado.
Las jaliscienses vendrán a la Angelópolis en búsqueda de afianzarse a los puestos de calificación, o de meterse entre los primeros tres puestos. Todo dependerá de lo que hagan hoy en el clásico tapatío ante las Rojinegras del Atlas.
Las jaliscienses vendrán a Puebla en búsqueda de afianzarse a los puestos de calificación, o de meterse entre los primeros tres puestos. Todo dependerá de lo que hagan hoy en el clásico tapatío ante las Rojinegras del Atlas.
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