O.J. Simpson, la historia de los guantes que lo dejaron en libertad: “Si no encaja, debe absolver”

Su carrera quedó marcada cuando lo acusaron de haber matado a su esposa y mejor amigo

Jesús Noé Suárez / El Sol de Puebla

  · jueves 11 de abril de 2024

Lo declararon no culpable. Foto: AFP

Este jueves fue anunciada la muerte de Orenthal James, conocido simplemente como O.J. Simpson, quien era un exjugador de los Buffalo Bills. Lo consideraron una estrella del fútbol americano por sus múltiples victorias, no obstante, uno de los hechos que marcó su carrera no está relacionado con los deportes, sino que con un asesinato y unos guantes.

Este jugador era uno de los iconos más grandes de la historia dentro de esta disciplina en los Estados Unidos, por lo que cosechó varios logros como ser el ganador de una edición del Superbowl o por su ingreso al Salón de la fama. Cuando estaba en uno de los mejores momentos de su carrera fue arrestado luego de que lo acusaran de un doble homicidio.

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Este proceso legal tuvo un gran impacto mediático, incluso lo llamaron “el juicio del siglo”, pues cientos de fanáticos estuvieron al pendiente de todo lo que era emitido por las autoridades. Al final pudo hacerle frente a los señalamientos de una forma poco convencional. A continuación te daremos más detalles:

Horacio Llamas y Borregos del ITESM en Puebla en Guadalajara. Foto: Cortesía Borregos Puebla

¿Por qué acusaron a O.J. Simpson?

Todo ocurrió en el año 1994, cuando fue apuñalada Nicole Brown, la ex esposa de O.J. Simpson, al igual que su mejor amigo Ronald Goldman. Los cuerpos fueron encontrados en el patio de la mujer, quien vivía en Los Ángeles, California.

Las autoridades llegaron al lugar de los hechos para analizara la escena, fue de este modo como encontraron un guante lleno de sangre que le pertenecía a las víctimas. Ante esta situación, la policía acudió a la casa del deportista para notificarle los hechos, pero no lo encontraron en su domicilio.

Los oficiales decidieron aun así acceder a su propiedad y encontraron que junto en una de las puertas de su camioneta igual había sangre, al igual que el otro par del guante, el cual también tenía varias manchas de esta sustancia.

El juicio fue en 1996. Foto: AFP

Esto provocó que O.J. fuera tomado como el principal sospechoso y lo arrestaron. Para poder detenerlo los agentes tuvieron que montar una persecución que fue televisada y milles de personas la vieron en vivo.

El nuevo entrenador en jefe se dijo contento de la oportunidad de retornar a la ONEFA. Foto: Bibiana Díaz | El Sol de Puebla

Oficialmente su juicio comenzó en 1995, en el que el acusado se declaró la inocente, aunque el estado consideraba que tenía todos los elementos necesarios para declararlo culpable. Durante este proceso incluso se dijo que se podría tratar de un caso de racismo y que un policía había dejado la evidencia en su contra.

¿Cómo lo salvaron los guantes?

Por varias semanas se pensó que era cuestión de tiempo para que lo sentenciaran, pero el rumbo del litigio cambió el 15 de junio de ese mismo año, pues el fiscal le ordenó probarse los guantes encontrados en la escena del crimen.

Fue así como frente a todo el jurado O.J. se colocó el guante izquierdo y con una ligera sonrisa enseñó que no le quedaba; hizo lo mismo con el derecho y dio el mismo resultado, pues ninguno de los pares parecían ser de su talla.

Para terminar levantó los dos brazos para demostrar que esas prendas no cubrían por completo sus palmas. Johnnie Cochran, quien lideraba su defensa, expresó: "Si no encaja, debe absolver".

Los guantes no le quedaron. Foto: AFP


Con esto fue declarado no culpable el 3 de octubre, por lo que terminó con este capítulo en su vida. Aunque esto fue suficiente para el jurado, algunas personas nunca estuvieron de acuerdo y creen que otros factores intervinieron.

A pesar de esta victoria, todo cambió para Simpson en 2007, cuando fue arrestado por secuestro, así como por robo a mano armada a dos coleccionistas de objetos deportivos. Por este crimen pasó nueve años en prisión y recuperó la libertad en 2017.