"La banderilla, mire usted qué poca cosa / cualquier cosa tarda más en crecer" diría el maestro Manuel Benítez Carrasco, poeta andaluz. El olor a madera, un vaso de agua y las canciones flamencas que interpreta Diego "El Cigala" acompañan la mesa de trabajo donde el maestro Gustavo Rugeiro elabora con calma, pasión y arte cada una de las banderillas que serán utilizadas para el festejo de este sábado en Val’Quirico, un evento ecuestre taurino que genera más de medio millar de empleos directos.
Mejor conocido como "El Lobo", el artista Gustavo Rugerio nos muestra paso a paso cómo se elaboran los también llamados "palitroques" que habrán de usar los rejoneadores Pablo Hermoso de Mendoza, Luis Pimentel, Mónica Serrano y Guillermo Hermoso para despachar un encierro tlaxcalteca de Rancho Seco.
LOS INICIOS
"Yo creo que tenemos ya los 30 años haciendo banderillas. Tanto para El Relicario de Puebla, Acrópolis, ahora Val’Quirico así como para diferentes partes de la región: Apizaco, Huamantla, Teziutlán y algunas otras partes del estado de Veracruz".
LOS CLIENTES DE LAS BANDERILLAS
"Cuando recién había tomado la alternativa el matador Uriel Moreno "El Zapata" nos solicitaba que le hiciéramos sus banderillas. A mí me emocionaba mucho ver cuando las ponía en La Plaza México. Era un orgullo saber que esas banderillas eran hechas por mi", comenta emocionado.
MATERIALES Y PROVEEDORES
"Consigo pino de primera calidad para las banderillas, los precios varían según la temporada y los proveedores de acuerdo a los precios que me dan", nos comenta mientras va elaborando paulatinamente cada banderilla. Insertando el rejón, cortando el papel abigarrado y escuchando su flamenco. En pocas palabras, hay arte en el ambiente.
HACER BANDERILLAS ES UN ARTE
"Fíjate que nadie me enseñó a elaborar banderillas, yo solito fui viendo. Desbarataba unas y observando cómo estaba hechas y luego intentando hasta que salían. Gracias a esta afición que tengo a la fiesta también, supongo, se me facilitó". Nos confiesa Gustavo mientras va girando una banderilla para supervisar cómo quedó. Como si fueran algodones de azúcar. "Una vez que ya sabía hacerlas, en los servicios de monosabios donde presto mis servicios incluí hacer las banderillas para El Relicario y afortunadamente con buenos resultados".
UNA ECONOMÍA QUE LE AFECTÓ
Gustavo Rugerio ha sobrevivido en todo este tiempo de ayuno taurino pintando paredes, postes y cuanto le solicitan. Si bien es cierto no se ha declarado una crisis económica en nuestro país, la poca actividad taurina que hay en Puebla, provoca que muchas personas como Gustavo busquen otras opciones de empleo para hacer frente a los compromisos propios de un paterfamilia.
Al igual que las más de mil personas que se emplean para una corrida de toros, "El Lobo", está convencido que lo que realmente le gusta hacer es trabajar en el ambiente taurino y de esa manera seguir siendo el sustento de su hogar. "Mientras no había toros en Puebla me tuve que dedicar a otra cosa. No puedo quedarme sin hacer nada. Ahora estoy muy ilusionado de que haya más actividad taurina. Ese es mi trabajo y el que disfruto hacer. Antes había más de 30 festejos al año en Puebla".
FINALMENTE
"Pues solo espero a que empiecen las corridas. Disfruto mucho mi trabajo y ya quiero que venga el festejo de este sábado". Comentó el responsable de que se adornen los morrillos de los toros para Val’Quirico. "La banderilla nunca podrá crecer hasta bandera / se ha quedao en chiquilla, zalamera, graciosa y airosa" remataría el poeta español Benítez Carrasco.
