La presión de los neumáticos es un parámetro que se debe revisar de manera constante, pues la falta o exceso de aire puede causar diferentes problemas, que van desde desgastes hasta accidentes. Por esa razón, las y los conductores tienen que verificar que todo se encuentre en orden, en especial antes de realizar un trayecto largo.
Para conocer el nivel correcto, los dueños de las unidades pueden revisar la información que se encuentra en la calcomanía colocada en el marco de la puerta del lado del operador o en la tapa de la gasolina; en caso de que no estén ahí esos datos, es posible consultar el manual del propietario que debió haber sido entregado al momento de adquirir el vehículo.
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Existen algunos indicadores que sirven para medir estos niveles, aunque lo recomendable también es acudir con un profesional para que haga una evaluación detallada y de esta manera se pueda solucionar cualquier inconveniente.
¿Qué pasa si están infladas de más?
El inflado excesivo de las llantas de un automóvil es una práctica que puede generar serios riesgos al conducir. Aunque algunos conductores puedan creer que tener las llantas más infladas mejorará el rendimiento o la eficiencia del combustible, las consecuencias pueden ser contraproducentes y peligrosas.
De acuerdo con la empresa automotriz Kavak, una de las principales consecuencias es la reducción de la tracción, pues en estas situaciones tienen una superficie de contacto menor con el pavimento, lo que disminuye la adherencia al suelo.
Esto puede ser riesgoso en condiciones de lluvia o nieve, donde la tracción se requiere para mantener el control del automóvil. Pero es no es el único problema, ya que pueden aparecer otros más.
Mayor desgaste
La compañía aseguró que al conducir de esta manera es posible que aumente considerablemente el desgaste interno, lo que se verá reflejado en la banda de rodadura y provocará que se deban realizar gastos adicionales.
Por otro lado, se explicó que las llantas en ese estado son más susceptibles a daños por objetos punzantes en la carretera. Además, un reventón a alta velocidad puede llevar a una pérdida de control de la unidad.
Un estudio realizado por la National Highway Traffic Safety Administration (NHTSA) en Estados Unidos indica que una presión de neumáticos incorrecta es un factor contribuyente en una cantidad significativa de accidentes de tráfico. Mantener las llantas a la presión recomendada por el fabricante es crucial para asegurar un rendimiento óptimo y seguro.
Los sistemas de monitoreo de presión de llantas (TPMS, por sus siglas en inglés) son una herramienta útil para los conductores. Estas herramientas alertan al conductor cuando la presión es demasiado baja o alta, ayudando a mantener los niveles seguros y recomendados.