La UPAEP en la rama varonil no pudo mantener el buen trabajo que horas antes desarrolló a la perfección la femenil y terminó por caer 67-73 ante los Aztecas de la UDLAP quienes no solo se llevaron una edición más del Clásico de Básquetbol Universitario, extendieron su dominio a 11 triunfos por solo 2 reveses desde la creación de la Liga ABE.
Y es que las Águilas regalaron terreno desde el primer periodo donde el entrenador Javier Ceniceros decidió sacar de la quinteta titular a su mejor hombre, Iván Montano, situación que a la postre, terminó por pesarle al equipo ya que él marca la diferencia en la duela, misma que durante los primeros 10 minutos del partido, terminó por un claro dominio de los visitantes por marcador de 21-12.
No solo fue el dominio de los visitantes, UPAEP presentó nerviosismo y ansiedad, lo que provocó precipitaciones al momento de buscar el enceste, incluso con varios intentos de tiros de larga distancia que no surtieron efecto, su contraparte, forzaron con la presión defensiva. Así fue la tónica durante los dos primeros periodos del enfrentamiento, yéndose al descanso con marcador favorable para la UDLAP 37-30 al medio tiempo.
Al regresar de la pausa, ambos conjuntos se vieron menos nerviosos y mejor asentados en la duela, esto provocó que fuera un vaivén de jugadas para un acción-respuesta que fue sumando unidades en el marcador. Pues cuando la Tribu Verde asestaba un tiro de tres, el cuadro rojo respondía con uno a un metro del aro y luego viceversa; de esta forma el cuadro local lograba ponerse a un punto de diferencia al término del tercer capítulo.
El siguiente fue un festín de triples para ambos conjuntos, acompañado de momentos ríspidos que fueron alentando a las gradas para apoyar a su equipo preferido. Pero la acción que definió todo fue a 2 minutos y medio de concluir cuando UPAEP estaba a 4 puntos de igualar el juego para el 68-64, porque Alexis Martínez metió un doble con un tiro libre derivado de una falta; el local respondió con un triple, pero el daño estaba hecho y los segundos estaban por consumirse. Ariel Delgado tuvo el último disparo al aro que fue el definitorio para bajar los decibeles y que la Ráfaga Verde se llevará a casa este Clásico.