Los Pericos de Puebla cubrieron a corto plazo una de las principales preocupaciones que se tenían para esta temporada al consegui9r los servicios del experimentado receptor de 38 años de edad, Gabriel Gutiérrez, quien destaca por sus cuatro temporadas en ligas menores de Estados Unidos, antes de debutar en la pelota mexicana con los Petroleros de Minatitlán en 2009.
Gutiérrez, quien nació un 24 de noviembre de 1983 en Guasave, Sinaloa, llegó a los Pericos procedente de los Olmecas de Tabasco, en un cambio por los también receptores, Isidro Piña, un veterano de 33 años y 14 campañas en el circuito, y el novato Oscar Hurtado.
Gabriel, quien en la pelota mexicana vistió la franela de los Diablos Rojos del México entre 2010 y 2015, fue parte de los campeones Toros de Tijuana en la campaña pasada, quienes en febrero lo mandaron a Tabasco, que a su vez hizo el movimiento con Puebla.
En su carrera ya fue campeón tanto con Diablos (2014) como con los Toros (2017 y 2021), lo que s un claro indicativo de su calidad para manejar los lanzadores.
El receptor originario de Guasave comenzó su carrera ya con 21 años de edad en 2021 cuando fue firmado por la organización de los Dodgers de los Ángeles, con quienes llegó a jugar en diferentes sucursales desde Clase A hasta AAA.
Sus primeros pasos en la pelota mexicana los dio en la Liga de la Costa del Pacífico donde debutó con Guasave en la campaña de 2005-2006 y después vistió las franelas de Mexicali, los mismos Algodoneros, Charros de Jalisco y Obregón. En total, ha representado a México en tres Series del Caribe.
Aunque Pericos contaba en esa posición con Isidro Piña, cinco años menor, la llegada de Gutiérrez, añade a un auténtico cerebro detrás del plato, en lo que terminan de dar el estirón receptores de la talla de Kevin García y Juan Kirk, además de los Tomás Jesús Córdova y Víctor Landeta.
En la campaña del 2021 con los Toros, Gutiérrez participó en 42 juegos y fue el cátcher regular de los Fronterizos, donde tuvo 23 asistencias, echó fuera a 11 de los 26 corredores que intentaron estafarse la almohadilla para un porcentaje del 42 por ciento de efectividad, cometió tres errores, tres passedball, participó en cuatro dobles matanzas y terminó con un porcentaje de fildeo, de los más altos del circuito con .991.
En el aspecto ofensivo, Gutiérrez acumuló una de sus mejores campañas al batear para .384 de porcentaje, con cinco jonrones, 23 impulsadas y un porcentaje de embasarse y bases alcanzadas de .995, el mejor entre los receptores con más de 130 turnos bate.
En total, Gutiérrez acumula once temporadas en la pelota de verano, y 17 más en la invernal mexicana, lo que hablan de su experiencia y liderazgo detrás de la receptoría.
Con ello, los Pericos empiezan a consolidar esa espina dorsal que debe tener todo equipo que aspira a ganar: con un receptor de calidad, un campo y un segunda base de categoría, como Jorge Flores y Ciro Norzagaray y un jardinero central como Pete O’Brien, respaldado por su buen guante y su capacidad ofensiva.
Ahora solo resta, armar un cuerpo de pitcheo de altura, para aspirar a logros mayores.
PRETEMPORADA
Los Pericos cumplieron su décimo segundo día de pretemporada, y después de los dos juegos interescuadras que realizaron entre jueves y viernes, comenzaron los primeros recortes en el grupo, ya que algunos, sobre todo lanzadores, no llenaron el ojo del cuerpo técnico a las primeras de cambio.