El lanzador poblano Diego Hernández Zapata, cuyo padre fue un destacado lanzador en la pelota local y su abuelo Jaime, un auténtico apasionado del beisbol, será firmado este jueves por la organización de los Yanquis de Nueva York, vía Lee Sigman, quien se ha convertido en el cazatalentos que más poblanos ha llevado al beisbol profesional.
Apenas ayer, Sigman firmó a Santiago "Gallito" Gómez. Curiosamente, ambos peloteros jugaron para Linces y representaron a Puebla en infinidad de campeonatos nacionales, en su paso por la Liga Zaragoza.
Con 17 años de edad, Diego, quien desde pequeño comenzó en la categoría escuelita de la Liga de Beisbol Infantil-Juvenil Ignacio Zaragoza, deslumbró a los buscadores diferentes equipos de Grandes Ligas, el año pasado en el campo de pruebas que se realizó en El Tejar, Veracruz, pero fueron los Yanquis los que ofrecieron las mejores condiciones.
Dueño de una recta de 91 millas, un gran repertorio de pitcheos rompientes, donde se incluye su slider, el estudiante de segundo de preparatoria en la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), conocido como “La Cachora” – por su tez blanca- será el tercer poblano que firma el ex manager de los Tigres de la Angelópolis, para la organización de los Yanquis, y segundo en días consecutivos.
Lee firmó en el 2009, vía Pericos de Puebla, a César Vargas, el serpentinero derecho que militó hace unos meses en la pelota japonesa y se tomó su tacita de café en la mejor pelota del mundo con los Padres de San Diego en 2016, y ayer lo hizo con el segunda base, Santiago Gómez.
De padre nacido en San Salvador Chachapa, Diego vio la primera luz en la ciudad de Puebla, pero desde ese mismo día de su nacimiento se sabía que iba a ser beisbolista.
Su papá Jaime y su tío Hugo también jugaron beisbol a buen nivel. Jaime era serpentinero y Hugo receptor, por lo que hacían una pareja perfecta para orgullo de su padre Jaime (QEPD) y su señora madre, doña Armida, quien, por ser originaria de Guasave, inculcó a sus hijos esa pasión por el beisbol.
Los dos nacieron en la Liga Zaragoza y más tarde jugaron en diversos equipos poblanos.
Jaime siguió el ejemplo de sus padres y desde pequeño llevó a Diego a su alma mater la Liga Zaragoza, y empezó a poner los cimientos para su formación como beisbolista, primero con Linces del “Tatito” Luna y más tarde con Pericos que dirigía el mismo Jaime.
“Mi hermano se encargó prácticamente de llevarlo poco a poco, y enseñarle lo que sabe. Él lo dirigió en la liga y lo encaminó como lanzador”, dice con orgullo el tío Hugo.
Con el paso del tiempo, Jaime se dio cuenta de las habilidades de su hijo y la madera que tenía.
Con el apoyo del instructor dominicano Raúl Hernández, quien tiene su academia en Libres, encontró ese puente para que Diego participara en diversos campos de pruebas y fuera checado por equipos de Ligas Mayores.
El primero que se deslumbró fue San Diego, pero los Yanquis ofrecieron mejores condiciones y Jaime, representante directo de su hijo, decidió que firmara con el 27 veces ganador de la Serie Mundial.
Hay que destacar que Diego firmará este jueves de manera directa con los Yanquis, sin intermediar ningún equipo de Liga Mexicana, tomando en cuenta que ya el circuito se maneja como Liga Independiente.
A diferencia de Santiago Gómez, con quien compartió experiencias en la Liga Zaragoza, con quien jugó en mismo equipo Linces y firmó vía Pericos, Diego se irá como pelotero libre a los Yanquis, y en el futuro tendrá que entrar en un sorteo para saber qué equipo de Liga Mexicana será dueño de sus derechos de retorno.