Mientras Lobos lucha para evitar su primer descenso y no sumarse así a los equipos que un año después de lograr la categoría perdieron la misma; los Tiburones Rojos del Veracruz tratan por todos los medios de no bajar por quinta vez a la división de plata.
Los escualos, quienes tras caer el domingo con León le dieron vida a La Manada en la ruta hacia la salvación, corren el riesgo de descender por tercera vez en la era del porcentaje; criterio utilizado desde la campaña 1991-1992 y el cual cobró como primera víctima a las Cobras de Ciudad Juárez.
Veracruz, además pelea con una aparente maldición que los azota cada 10 años desde 1998 cuando descendieron por primera vez con el cociente como criterio.
En 1998 y 2008, los Tiburones Rojos perdieron la categoría con fracción de 1.1078 y 1.0784 de forma respectiva. En el presente registran 1.0600; es decir, su porcentaje es peor en relación al de sus primeros dos descensos, pero con la ventaja de contar con el de Lobos BUAP para salvarse.
Si los jarochos pierden la categoría, además de alargar su maldición, se convertirían en el equipo con más caídas o regresos a la división de plata en la historia del futbol mexicano con cinco, superando a los Potros de Hierro del Atlante.
Lobos, en cambio, perdería por primera vez la categoría; pero se uniría al grupo de equipos descendidos tras un año en el máximo circuito como sucedió en últimos años con Dorados de Sinaloa y los Leones Negros de la UdeG en los cursos 2015-2016 y 2014-2015.
Si en la jornada 16, La Manada cae contra Rayados de Monterrey consumaría su vuelta al Ascenso sumando para Puebla como ciudad su tercer descenso en la historia. La Angelópolis se uniría entonces a Querétaro como las urbes con tres descensos desde la década de los 90.
Los dos anteriores en Puebla corrieron a cargo de La Franja en las campañas 1998-1999 y en la 2004-2005.
ÚLTIMOS DESCENSOS
- 16/17 Jaguares
- 15/16 Dorados
- 14/15 Leones Negros
- 13/14 Atlante
- 12/13 Querétaro
- 11/12 Tecos
- 10/11 Necaxa
- 09/10 Ciudad Juárez
EL DATO
SERGIO BUENO es el único técnico desde la temporada 1991-1992 con más descenso en su haber con dos en 2011 con Necaxa y 2017 con Chiapas.