La primera parada del Rally del Golfo al Pacífico se completó el jueves en el Museo Internacional del Barroco de Puebla con una veintena de tripulaciones que completaron un trayecto de casi 275 kilómetros.
La etapa dos trajo a pilotos y a navegantes a la Angelópolis desde el Puerto de Veracruz y este viernes la carrera se completará cuando los autos pongan rumbo a Acapulco, donde el rally llegará a su fin luego de ponerse en marcha el martes siete en la Ciudad de México.
El jueves el principal obstáculo a librar por los pilotos de Veracruz a Puebla fueron los camiones de carga, a decir del copiloto del equipo Grupo Correcaminos, Bruno Valdovinos.
“La verdad fue muy divertido el trayecto y con mucha velocidad, a pesar de encontrarnos con bastantes camiones de carga y eso por momentos hizo pesado el camino. La verdad que no sentimos el tiempo y sólo te das cuenta del mismo hasta que llegas a tu destino”, compartió el navegante.
El viernes esperan por las más de 20 tripulaciones participantes casi 400 Kilómetros, pero el premio es gordo porque presume el Océano Pacífico y a sus paradisíacas playas como meta. Aunque el grado de dificultad para los participantes e inclusive por el propio comité organizador es mayor por el estado de la carretera tras el sismo de 7.1 grados en la escala de Richter del martes pasado con epicentro en las costas de Guerrero.
Sin embargo, tanto el gobierno de dicha entidad como la gente a cargo del evento han estado en comunicación en últimas horas destinando inclusive un carril de la carretera para los participantes del rally. Por lo tanto, el ponerse adelante del pelotón marcaría la diferencia a kilómetros de Acapulco.
“Hay más curvas mañana, hay que medir el control y la velocidad. Sobre la carretera nos han dicho que no hay deslaves y si se presentan derrumbes por lo sucedido se trabajará y tendrá listo para que lleguemos a nuestro destino”, remató Valdovinos.