Escoto muestra el camino y Lobos pone fin a la malaria

Redacción

  · domingo 17 de septiembre de 2017

Foto: @MazaRP2

BOCA DEL RÍO, Veracruz.- La batalla del puerto, un conflictoque presumía en la previa de tintes de juicio final para elperdedor, la ganó Amaury Escoto para Lobos.

El delantero, que ingresó como cambio en el complemento ycreyó lesionarse de gravedad durante sus primeras intervenciones,remató suave de derecha un servicio raso de Luis Advíncula en laagonía del partido-minuto 83- para que La Manada volviera a ganardesde el pasado cinco de agosto.

Antes de eso sólo se contó de pequeñas escaramuzas, intentosaislados en ambos costados de la cancha y un empate que favorecíaa los Tiburones Rojos en la carrera por la salvación.

Rafa Puente, técnico de La Manada, tuvo razón cuando en lavíspera al duelo explicó el posible escenario el domingo en elLuis “Pirata” Fuente: “Veracruz no tiene problema si firma laigualada”.

Y los escualos salieron a eso, al menos en el complemento y trasaprovechar las condiciones climatológicas en el puerto durante losprimeros 45 minutos, donde cerca estuvieron de vacunar a unos Lobosasfixiados por la humedad y el calor.

Pero gracias a un resucitado arquero Jorge Villalpando, quiensacó un tiro libre directo a los 15 minutos con sello de gol, yuna oportunísima barrida de Pedro Aquino cuando “Keko”Villalva vaciaba la recámara dentro del área, el partido semantuvo 50-50, con opciones para cualquiera.

Pero el sol desapareció en el horizonte y con sólo la humedadcomo único enemigo para los licántropos, éstos por finmanifestaron su juego primero a través de la pelota parada.

Heriberto Olvera sirvió a primer poste un tiro de esquina porizquierda, donde Francisco “Maza” Rodríguez extendió lajugada con un taconazo que encontró solo a Emmanuel Herrera. Elargentino se llenó de balón, pero mandó el disparo por fuera dela red.

Sin embargo, eso no minó la crecida de Lobos en la cancha.

Los licántropos jugaban y generaban oportunidades, se daban ellujo de rematarle dentro del área a los Tiburones Rojos como lohizo Alfonso Sánchez. El “16” prendió un cabezazo que aquemarropa sacó Melitón Hernández para mantener el cero;mientras el frío producto del nervio de la jugada recorría lagrada del “Pirata” Fuente.

Gracias a eso Veracruz se activó y con Villalba como su hombremás peligroso tuvo otra de gol, que contuvo el cruzamiento de“Maza” Rodríguez para que el disparo saliera como un peluche alas manos de Jorge Villalpando.

Esa jugada evidenció cierto cansancio entre las filasuniversitarias, que no replegaron como en el primer tiempo. RafaelPuente entonces movió ficha, no perdería el partido por elcansancio generado por el calor y la humedad del primer tiempo ymandó al campo a Escoto por Tamay, Fabbro por Sánchez y Olverapor Adrián Morales.

Uno de ellos le ganaría el partido, no sin antes dar elsusto.

Escoto forcejeó con su marcador en una jugada clara hasta caeral suelo, llevándose las manos a la rodilla derecha y pidiendo elcambio.

Las atenciones médicas universitarias ingresaron al campo,hicieron las pruebas y comprobaron que aquello sólo se trataba deun susto. Escoto podía y debía seguir jugando.

Tal vez los médicos de Lobos conocían el destino y la cita deéste con el dorsal 7. Y Escoto tras superar el susto, a cinco delfinal remataba suave y de derecha un servicio raso de LuisAdvíncula para curar la malaria.

VERACRUZ.- Edgar Hernández (P); Lucas Rodríguez; JoséVelázquez; Guido Milán; Jesús Paganoni; Luis Martínez; CristianPellarano; Adrián Luna; Christian Valdéz; Daniel Villalva;Cristian Menéndez. DT. Juan Antonio Luna.

LOBOS BUAP.- Jorge Villalpando (P); César Cercado; FranciscoRodríguez (C); Heriberto Olvera (Carlos Adrián Morales 79); LuisAdvíncula; Pedro Aquino; Eduardo Tercero; Alfonso Tamay (AmauryEscoto 58’); Juan Carlos Medina; Alfonso Sánchez (JonathanFabbro 73’); Emmanuel Herrera. DT. Rafael Puente del Río.