Relevos atómicos increíbles a los que no les faltó nada en el pelito principal del lunes clásico del Consejo Mundial de Lucha Libre (CMLL) en la Arena Puebla, pues los vuelos o las llaves los pusieron Hechicero, Bárbaro Cavernario, Volador y Místico; pero la trampa corrió a cargo de Euforia, Soberano, Titán y el japonés Hiromu Takahashi.
Y sí, al final una treta de Euforia sobre Hechicero, sacándole la máscara por la vía de la ilegalidad en la tercera caída cuando el réferi volteaba a otro lado; además de un faul de Hiromu Takahashi a Místico bastó para que El Gigante de La Laguna y el nipón junto a toda su esquina levantaran las manos en El Templo del Dolor.
Todo esto ante la desaprobación y una que otra mentada del respetable.
Eso sí, hay posibilidad de una revancha. De esa chance ya se sabrá cuando avance la semana y se devele el cartel de próximo lunes.
Lo malo es que los peques se perderán el desquite porque al otro día ya hay escuela.
Hay lucha de campeonato
Viniendo de atrás, luego de perder la primera caída, la tercia de técnicos integrada por Stigma, Fugaz y Valiente sometió a Los Depredadores en el duelo semifinal de la función del lunes en la Arena Puebla.
Stigma, La Pieza Poblana Perfecta, y Fugaz rindieron con hurracarranas a Magia Blanca y Rugido para abrochar el triunfo de los estetas.
Pero la cosa no acabó ahí y los técnicos ya muy valientes le lanzaron el reto a Magia Blanca y Rugido por los cetros nacionales de parejas. Los Depredadores no se hicieron menos y les dieron el sí para tener lucha de campeonato el próximo lunes en El Templo del Dolor.
Los chacales carroñeros
Qué importa si Los Chacales del Ring, grupo integrado por los rudos Okumura, Pólvora y El Coyote se exacerbaron de violencia en el lunes clásico del CMLL en Puebla y perdían por descalificación ante Rey Samurai, Pegasso y Fuego quitándoles a la mala a éstos las máscaras en la tercera caída; ellos cumplieron con el manual de bolsillo del rufián.
Sí, si igual perdían porque los técnicos les daban vuelta por ser más luchadores sobre el encordado; pues daba igual caer con clase o vileza, ya que lo que sobra en la esquina de Los Chacales es villanía.
Y es que después de la primera caída, ganada por los rudos, los rufianes prácticamente no existieron.
Menudo grupito han integrado Okumura, El Coyote y Pólvora, que ante la falta de recursos no dudan en ir por todas con base a la trampa… aunque luego los cachen.