La utilización de materiales reciclables para la confección de la nueva playera del Puebla refresca la preocupación de la industria del futbol, en vías de mandar un mensaje a favor del medioambiente; mientras La Franja se convierte en una de las primeras escuadras en ocupar materiales reutilizables para sus equipaciones dentro del balompié nacional.
Pero apostar por elementos como el plástico de las botellas de agua o refresco para crear un uniforme de futbol no sólo es amigable con la naturaleza, pues al emplearlos se reduce 30 por ciento de la energía necesaria para la elaboración de playeras o shorts, también se traduce en buenos resultados dentro del campo para los equipos creyentes en este tipo de tecnología.
Y es que la materia prima para la facturación de las playeras ayuda a forjar elásticas con mejor desempeño para encarar la sudoración propia de los atletas. Si en el pasado, los jerseys se hacían pesados por la transpiración del ejercicio y afectaban el rendimiento de los futbolistas, ya que estos terminaban por llevar más peso sobre sí mismos; en el presente, ese factor prácticamente se ha reducido.
La competencia entre las marcas deportivas, en vías de marcar diferencia dentro de la cancha entre sus equipos patrocinados, llevó desde hace una década a apostar por este tipo de equipaciones recicladas.
El Mundial de Sudáfrica se convirtió en la gran vitrina para exhibir los uniformes y el juego del futuro. La famosa compañía de la palomita vestía por entonces a nueve selecciones en la máxima fiesta del futbol con su nueva tecnología.
Años más tarde, y siguiendo la tendencia, la marca alemana de las tres bandas se unía a la fiesta, vistiendo al Real Madrid con “basura” recogida o recuperada del océano.
Sin embargo, dicha equipación se volvió objeto de polémica cuando en un partido de la campaña 2016-2017 de la Liga de España, la elástica simplemente se despintó tras un aguacero, perdiéndose en la misma los distintivos de los patrocinadores.
Más tarde se supo que aquello se trataba de una reacción, pues el uniforme del conjunto blanco se elaboró 100 por ciento con materiales amigables con el medio ambiente. Cuando aquellos shorts y playeras recicladas de los merengues, la fábrica deportiva alemana pretendía la eliminación de 11 millones de botellas en zonas costeras.
A la par del Real Madrid, la marca de las tres bandas adhirió a su campaña a clubes como el Bayern Múnich (Alemania) y la Juventus (Italia). La empresa estadounidense de la palomita, por su parte, presume como estandarte de la nueva tecnología al Manchester United (Inglaterra) y el Barcelona (España).
- De ocho a 13 botellas de plástico se requieren para confeccionar una playera hecha con materiales reciclados