El ambiente familiar que generó el partido disputado por el Club América y Pachuca en el Estadio Cuauhtémoc, estuvo por terminar con un conflicto entre los aficionados del equipo azulcrema y elementos de la policía auxiliar al desalojar el inmueble tras la victoria de las Águilas dos goles a uno frente a los Tuzos.
Una vez que finalizó el partido lo aficionados que se encontraban en la Rampa Norte comenzaron a desalojar el Coloso de la Colonia Maravillas, pero en su paso se encontraron con elementos de la policía auxiliar que bloquearon el paso a fin de “controlar” la salida de la barra americanista.
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Sin embargo, todas las familias que se aglomeraron aproximadamente por 10 minutos en los pasillos del dos veces mundialista, argumentaron que no eran parte de la porra de las Águilas por lo que querían salir con tranquilidad para tomar el rumbo de regreso a sus hogares.
Durante la discusión, que sólo se mantuvo en palabras, uno de los aficionados le señaló a los policías que estaban “exponiendo la situación” puesto que había presencia de niños que terminaron asustados entre el ruido y los empujones con los que las personas se abrieron paso para salir del lugar.
La situación no dejó rastro de lesionados o algún percance mayor y, aunque las acciones no subieron de tono, el momento de tensión causó preocupación entre las madres que protegían a sus hijos para que no fueran empujados mientras otros jóvenes aficionados se paseaban con tranquilidad continuando con la celebración por el triunfo del Club América.
