Manolo Lapuente ni siquiera lo duda cuando le hablan de la posibilidad de convocar a Rafael Márquez al Mundial de Rusia: “La pregunta sería, ¿por qué no llamarlo?”.
El extécnico nacional conoce bien el aporte del zamorano, tras dirigirlo en la Copa Confederaciones de 1999, pues sabe del papel de Márquez ante el entrenador Juan Carlos Osorio como enlace entre el grupo y el cuerpo técnico en aras de mantener el orden, como la disposición en una concentración tan larga como la que se prestan a realizar los pre-seleccionados.
Giras, viajes o concentraciones en ocasiones cansan y relajan a los futbolistas, sobre todo cuando son tan largas. Pero ahí el papel de Rafa será fundamental para mantener el ordenLapuente
Aunque el cinco veces campeón del futbol mexicano pidió “no echarle toda la bronca” a Márquez en cuestión del liderazgo, instando a otros en la selección a dar el paso al frente para asumir los galones de capitán dentro o fuera de la cancha, que parece hoy no gozan de dueño.
Deben de aparecer otros, tampoco hay que echarle la bronca tan dura a Rafa. Ahí están Guardado, Vela, Fabián o Herrera, este es su momento y deben de aparecer
Lapuente aprovechó para agradecerle a Márquez por su contribución al futbol mexicano; además de fungir como una pieza clave en la conquista de la Confederaciones de 1999.
“Se trata de un profesional admirable, y en lo personal le tengo un cariño importante porque fue de los elementos claves en la Confederaciones”.
