Con la muerte de Don Enrique Montero Ponce, Puebla no solo perdió al decano del periodismo sobre todo en la radio, también se fue quien en distintas etapas tuvo una gran influencia dentro de los equipos profesionales de la entidad ya sea como reportero, periodista, inclusive como directivo, siendo el principal impulsor a través de su estación Tribuna Radiofónica del acontecer deportivo destacando además que era el espacio de las ondas hertzianas con mayor tiempo al aire que le dedicaba a los comentarios deportivos.
Desde joven, en su labor como reportero, tuvo sus primeros acercamientos en el deporte escribiendo las crónicas de las peleas de Box que eran publicadas para esta Casa editorial durante varios años.
Posteriormente y cuando la jerarquía de Enrique Montero Ponce crecía más y más, ya en espacio radiofónico de “Esquina” a través de la XEHR, los comentarios del fútbol y el béisbol no se hicieron esperar y fue ahí donde el amor para platicar del Puebla o los Pericos, reflejaban la pasión para no solo comentar del deporte, la afición que le profesaba a los representantes deportivos poblanos era evidente.
Ya con su propia estación, Tribuna Radiofónica, su espacio deportivo (el más extenso del cuadrante en Puebla), era cita obligada para escuchar la información o los comentarios de La Franja o los Pericos (en su momento también de los Ángeles negros) así como el amor que también profesó por la Fiesta Brava, otra de sus grandes pasiones.
La influencia de Don Enrique Montero Ponce fue tan importante y decisiva, que diferentes directivas, en su momento y oportunidad, requirieron de su presencia para formar parte de ellos ya que contaba con el amor a la poblanidad que logró imprimirle como consejero que le hizo válido el ser campeón con los Camoteros al ser parte de su directiva, de la mano de dos de sus principales amigos, Emilio Maurer y Manuel Lapuente.
Del mismo modo, su presencia en los Pericos fue importante, a tal grado, que su estación radiofónica fue durante varios años la “casa” en las transmisiones en Puebla, aventurándose a lo que muchos temen en la radio, transmitir Béisbol por varias horas.
En el “Rey de los deportes” siempre encontró amigos y aliados, sobre todo, con el Contador Rafael Moreno Valle Sánchez quien fue durante años el presidente de loa organización emplumada y con quien entabló una hermandad entre ambos personajes.
Era común encontrar a Don Enrique caminar por los pasillos del estadio “Hermanos Serdán” y pese a contar con un palco, prefería bajar a la tribuna general para convivir con la afición de su amado béisbol.
Y ni que decir de su idolatría en la pelota de las Grandes Ligas por los Yanquis de Nueva York.
La Plaza El Relicario también fue testigo ven muchas ocasiones de su presencia en las primeras filas para presenciar una buena corrida de toros, incluso, cuando lo ameritaba, viajaba a la Monumental Plaza México.
Puebla pierde no solo al pilar del periodismo en la entidad, al pionero del primer noticiero radiofónico en México, perdió al máximo impulsor de los deportes en los medios de comunicación y quien conocía desde sus entrañas el nivel direccional del deporte y como fue el puente exacto a través de la prensa.
A CONSIDERAR…
Desde que cursaba el tercer año secundaria mostró interés en el periodismo, comenzó a enviar colaboraciones sobre artículos de béisbol y de boxeo al director del periódico La Afición, las cuales fueron publicadas
14 Mil emisiones o más emitió al frente del programa radiofónico Tribuna de la Mañana
13 Años duró su programa Esquina, nombre que recibía también su columna en El Sol de Puebla
