Primera corrida de la feria de Puebla en su edición 2019. Noche fría, muy pobre entrada. Se lidiaron ejemplares de la casa ganadera de La Paz muy bien presentados, destacando los lidiados en segundo, tercero, cuarto y sexto. Se despidió de la afición poblana el matador Ignacio Garibay con faena de altos vuelos ante un toro que recibió los honores del arrastre lento. El michoacano Jorge Sotelo perdió las orejas con su primero por las fallas con los aceros y el español Esaú Fernández cortó una oreja por toro para ser el triunfador de la noche.
FAENA INTENSA DE GARIBAY
Ignacio Garibay, plomo y oro con remates en blanco.
Cherito 500 kilos No. 30 toro descarado, vuelto de pitones, que presentó complicaciones de principio a fin, mismo que provocó espectacular tumbo al picador. El matador Garibay voluntarioso y con oficio. Aviso y estocada para escuchar palmas.
Tildio No. 67 con 490 kilos toro de la despedida. Un toro que tuvo movilidad, nobleza y al cuál el matador toreó con profundidad y sentimiento. El toro de la despedida, le permitió dejar momentos de suma belleza desde el capote hasta la muleta. Detalles artísticos, de aroma en el adiós a la Angelópolis. Pinchazo y espadazo para facturar una oreja y arrastre lento al toro.
LO BORDÓ JORGE SOTELO
Jorge Sotelo verde manzana y oro.
Cuervo No. 36 480 Kilos. Toro negro, Bragado, meano, que tuvo nobleza, obediente, se desplazaba por ambos lados. Principalmente tuvo una tanda con mucho calado por la diestra donde el toro literalmente planeaba. El matador michoacano dejó paisajes de intensidad que conectaron con la galería. Pinchazo y estocada. Palmas al toro en el arrastre y salida al tercio para el matador.
Urraco con 500 kilos No. 25 toro alto, muy armado y que desarrolló sentido. Complicado. Al que Sotelo le hizo faena de aliño, de pitón a pitón, doblándose con el de La Paz, que en realidad parecía más “la guerra”. El público reconoció la labor del matador michoacano. Se puso pesado con la espada y escuchó palmas por su labor.
OREJA EN CADA TORO
El hispano Esaú Fernández con un cárdeno claro emotivo, con son. Al que realizó quite variado después del puyazo. Brindó su labor muletera a la esposa del empresario Pedro Haces, a la señora Martha Lago. Faena con transmisión, variada, en los medios. Un toro con calidad y emotivo, así como un torero firme en los toques, ajustado en los muletazos por ambos lados. Estocada entera, aunque caló al toro (salió la punta del estoque por un costado) para facturar una oreja.
Ya con el cierra plaza, un toro cárdeno, alto de agujas, bajo, que también tuvo recorrido, claridad y emotividad. El torero español volvió a brillar con su muleta, faena que repercutió en los tendidos de El Relicario y un público que se metió de lleno a las tandas aseadas y muletazos largos que pegó el matador español. Una oreja más a la espuerta que otorgó el juez, el matador en retiro José Antonio Gaona y así Esaú Fernández es el primer torero en abrir la puerta grande de El Relicario en esta feria poblana edición 2019.
Para el próximo viernes 8 de la noche. Segunda corrida de feria. El poblano Jerónimo, el tlaxcalteca Uriel Moreno “El Zapata” y Ernesto Javier “Calita” con toros de Los Ébanos. Sábado 27 de abril, 5 de la tarde entrada gratis, festival de aficionados prácticos.
EL RESUMEN DE LA CORRIDA
- EL ESPAÑOL Esaú Fernández triunfó en su presentación en Puebla
- EL MATADOR Ignacio Garibay se despidió de Puebla dejando una actuación de entrega, sentimiento y profundidad.
- EL PRÓXIMO fin de semana (viernes) habrá corrida nocturna y sábado festival taurino en El Relicario.