Lobos, campeón del Clausura 2017

Alland Jhonnathan López López

  · sábado 6 de mayo de 2017

El camino a la gloria no estuvo exento de sufrimiento. Y es quecuando parecía que Bravos de Juárez lograba el alargue tras elempate momentáneo de Leandro Carrijo, Omar Tejeda a un minuto delfinal prendía de derecha el esférico dentro del área fronterizapara anidarlo al fondo de la red para hacer el 2-1 (4-2 global) ymandar a Lobos a la final de ascenso.

Los Lobos de la BUAP, que se quedaron con las ganas de levantarla corona en el Clausura 2012, ahora buscarán ser el nuevoinquilino de la máxima categoría contra los Dorados de Sinaloa.Será la segunda vez en la historia que un representativo poblanose cite con “El Gran Pez” en la serie por la promoción; laotra vez fue en el Clausura 2007 cuando La Franja superó a Doradospara volver a la máxima categoría.

El triunfo de los universitarios estuvo en riesgo en el últimocuarto de hora del partido cuando Leandro Carrijo con un testarazoempataba 1-1 las acciones en el Olímpico Benito Juárez para dejara un gol del alargue a los Bravos. Los fronterizos olieron sangre ycargaron con todo, se le fueron a la yugular a La Manada que apenasllegaba al mediocampo y se agarraba con las garras a su mínimaventaja.

El tiempo se hizo más largo de los 15, 10 o un minuto que lequedaba al reloj. Pero una bocanada de aire fue suficiente parameter a la congeladora al partido.

Entonces llegó un latigazo hasta al área de Sinaloa buscando aAmaury Escoto, el “7” recibió por izquierda y llevó el balónhacia el tiro de esquina alejándolo de sus dos marcadores queperdieron de vista que Tejeda corría y cortaba hacía el centro.Escoto levantó la vista y de inmediato le compartió el“dulce” al “13” que saboreándoselo lo prendió de derechapara tumbar el intento de remontada del rival.

Pero sería injusto alabar el gol de Tejeda sin hacer lo propiocon el de César Cercado. “El Loco”, que festeja 10 añosenfundando en la casaca de la Benemérita, también puso su granitode arena en el duelo de vuelta con un remate seco de cabeza que seincrustó en el ángulo superior izquierdo de la cabaña de CiriloSaucedo para acercar a los universitarios en la final deascenso.

“El Loco”, que debutó en el futbol profesional con lacasaca de la Benemérita y vivió cada uno de los procesos delequipo que fueron desde entrenar en un estadio en obra negra, jugaren el Cuauhtémoc en el que jamás fueron bien vistos, defender laplayera sin cobrar o tener seguridad de cuándo lo volverían ahacer, dejar el cubil y regresar a él, ahora tendrá laoportunidad de ser de Primera con el equipo de sus amores, elequipo que le fijó el destino.